Determinar el significado de la Escritura, es una de las tareas más importantes que el creyente tiene en esta vida. Dios no nos dice que debemos simplemente leer la Biblia. Debemos estudiarla, manejarla correctamente. Estudiar las Escrituras es un trabajo duro. Una lectura rápida o superficial de la Escritura puede conducir a muchas conclusiones equivocadas acerca de lo que Dios dice. Por lo tanto, es crucial el entender varios principios acerca de cómo determinar el correcto significado de la Escritura.
1. Ora y pide al Espíritu Santo que te de entendimiento. Juan 16:13 dice, “Pero cuando venga el Espíritu de verdad, Él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir.” Jesús en Juan 16 está hablando del Espíritu Santo y dice que cuando ÉL venga (el Espíritu Santo vino en Pentecostés, Hechos 2), ÉL los guiará a toda la verdad. Así como el Espíritu Santo guió a los apóstoles en la escritura del Nuevo Testamento, ÉL también nos guía en el entendimiento de la Escritura. Recuerda, la Biblia es el libro de Dios, y necesitamos preguntarle a ÉL lo que significa. Si eres un cristiano, el autor de la Escritura, el Espíritu Santo, mora dentro de ti,... y Él quiere que entiendas lo que ÉL escribió.
2. No saques un texto de la Escritura del contexto que lo rodea, y asumas que el significado del texto no depende de los versos que la rodean. Debes siempre leer los versos y capítulos entre los que se encuentra, y familiarizarte con el propósito del libro. Mientas que toda la Escritura viene de Dios (2 Timoteo 3:16; 2 Pedro 1:21), Dios usó a hombres para que la escribieran. Estos hombres tenían un tema en mente, un propósito para escribirlo, una idea o ideas específicas que ellos estaban estructurando. Lee los antecedentes del libro de la Biblia que estás estudiando para encontrar quién escribió el libro, a quién fue escrito, cuándo fue escrito y por qué fue escrito. Luego lee los capítulos anteriores al verso o versos que estás estudiando para sentir cuál era exactamente el tópico acerca del cual el autor humano estaba escribiendo. También ten cuidado de dejar que el texto hable por sí mismo. Algunas veces la gente le asignará sus propias interpretaciones al significado de las palabras, para obtener la interpretación que ellos desean.
3. No intentes ser totalmente independiente en tu estudio de la Biblia. Es arrogante el pensar que tu no puedes aumentar tu entendimiento, a través del trabajo de toda una vida de otros que han estudiado las Escrituras. Algunas personas, equivocadamente, se acercan a la Biblia con la idea de que dependerán solo del Espíritu Santo y descubrirán todas las verdades ocultas de la Escritura. Cristo, al darnos el Espíritu Santo, ha otorgado gente dotada y dones espirituales para el cuerpo de Cristo. Uno de estos dones espirituales es el de la enseñanza (Efesios 4:11-12; 1 Corintios 12:28). Estos maestros son proveídos por el Señor para ayudarnos a entender correctamente y a obedecer la Escritura. Siempre es sabio estudiar la Biblia con otros creyentes, ayudarnos unos a otros a entender y aplicar las verdades de la Palabra de Dios.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario