sábado, 31 de mayo de 2008

Jesús en tierra de los gadarenos

Para esto apareció el Hijo de Dios,
para deshacer las obras del diablo.
1 Juan 3:8.

Un hombre poseído por los demonios aterraba a los habitantes de Gadara. Vagaba desnudo, dando alaridos e hiriéndose con las piedras; a veces se escondía en las tumbas, porque su ambiente era la muerte. Nadie había logrado dominarlo. Este es el trágico cuadro de una humanidad caída, guiada ciegamente por el diablo.

Pero Jesús llegó en una barca junto con sus discípulos. Tan pronto como el endemoniado lo vio, corrió hacia él y exclamó: ¿Qué tienes conmigo, Jesús, Hijo del Dios Altísimo? Te conjuro por Dios que no me atormentes (Marcos 5:7). Satanás y los demonios saben quién es Jesús y cuál será su fin: el infierno. Pero entre esos seres maléficos y nuestro Salvador no hay relación posible.

El nombre de ese demonio, Legión, pone en evidencia el poder de Satanás, poder tenebroso que invade a la humanidad sin Dios. Pero no temamos, porque el Hijo de Dios vino para deshacer las obras del diablo (1 Juan 3:8).

Para librar a ese desdichado, Jesús permitió a los demonios que entraran en un hato de cerdos que se precipitó en el mar. La gente acudió y pudo constatar la liberación total de aquel que había sido poseído: lo vieron sentado, vestido y en su juicio cabal a los pies de Jesús.

Si usted está confrontado a un grave problema como la droga, el alcohol o cualquier otra cosa, sólo Jesús puede ofrecerle una liberación total. Tenga fe en él y pídasela con ferviente oración, dondequiera que se encuentre, empleando sus propias palabras, como cuando se dirige a un amigo.

Fuente: La Buena Semilla

viernes, 30 de mayo de 2008

Debajo de las alas de Dios

" ..Cuantas veces quice juntar a tus hijos, como la gallina junta a sus polluelos debajo de las alas, y no quisiste ! "

( San Mateo 23 : 37 )



Las dificultades de la vida se vuelven cada vez mas fuertes en la misma proporcion que tu fe en Dios se ve incrementada, y llega el momento en el cual sientes que no podras salir de las tormentas generadas por la afliccion.

Pero la Palabra de Dios sostiene a todos sus hijos, porque tiene poder.

Cuanto te sientas asi, inmediatamente ve en busca de las maravillosas promesas que Dios ha dejado escritas, y en forma maravillosa recibiras el aliento del cielo para continuar.

En el versiculo citado, Cristo se compara con una gallina, la cual proteje a sus polluelos del peligro. Lo cual significa que todo lo que te acontece, El lo ha permitido para tu propio crecimiento espiritual, y que no dejara que caiga sobre ti, una carga que no puedas soportar.

Algo mas, que Dios ha puesto en mi corazon para compartirlo con su rebaño, es que todo lo que te suceda, ya sea pobreza, enfermedad y todo tipo de tribulaciones, antes de que llegue a ti, primero paso por Cristo, y El ha dado la aprobacion para que te suceda; Cristo lo ha sufrido antes que tu, y tambien le puso limite y fecha.

Pronto saldras jubiloso de esa etapa, Cristo ha estado protegiendote siempre, jamas te ha dejado solo, Cristo te ha tenido bajo sus alas protectoras, y estara contigo hasta el final de tus dias sobre la tierra.

Oracion:

Amado Dios eterno, te rogamos por todos tus hijitos que se sienten solos y abandonados enmedio de las pruebas.

Te rogamos que les consueles y que ellos se den cuenta que tu estas a su lado, protegiendolos con tus alas de amor.

Ayudalos amado Dios, proveeles todo lo que necesitan y que tu Santo nombre sea glorificado en sus vidas.

En el nombre de Cristo Jesus,

Amen y amen


Reflexion escrita por: Dr Jose Luis Gonzalez

Las virtudes de la sangre de Cristo

Sin derramamiento de sangre no se hace remisión
Hebreos 9:22.

Cuando la sangre fluyó de su costado, Cristo estaba dando su vida por los pecadores. Los cristianos tienen en común el hecho de ser salvos por la preciosa sangre de Jesucristo.

He aquí algunas de las virtudes de esa sangre derramada que borra nuestros pecados. Gracias a ello somos:

Perdonados: tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia (Efesios 1:7)

Lavados: nos lavó de nuestros pecados con su sangre (Apocalipsis 1:5)

Purificados: la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado (1 Juan 1:7)

Justificados: Justificados en su sangre, por él seremos salvos (Romanos 5:9)

Comprados: con tu sangre nos has redimido para Dios (Apocalipsis 5:9); habéis sido comprados por precio (1 Corintios 6:20)

Reconciliados con Dios: mediante la sangre de su cruz (Colosenses 1:20); Hechos cercanos por la sangre de Cristo (Efesios 2:13)

Introducidos en la presencia de Dios: teniendo libertad para entrar en el Lugar Santísimo por la sangre de Jesucristo (Hebreos 10:19)

Liberados de la esclavitud del diablo: fuisteis rescatados… con la sangre preciosa de Cristo (1 Pedro 1:18-19)

Santificados: es decir, puestos aparte para ser consagrados a Dios, por medio de la sangre en la cual fuimos santificados (Hebreos 10:29)

Fuente: La Buena Semilla

jueves, 29 de mayo de 2008

Por que causas se puede dar lugar al diablo?

Efesios 4:27

Ni deis lugar al diablo.

Si meditamos lo que dice Dios en todo el capitulo 4 de Efesios, el contexto nos declara cómo es que le podemos damos lugar al diablo:

Efesios 4:27

1 Yo pues, preso en el Señor, os ruego que andéis como es digno de la vocación con que fuisteis llamados, 2 con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor, 3 solícitos en guardar la unidad del Espíritu en el vínculo de la paz;

17 Esto, pues, digo y requiero en el Señor: que ya no andéis como los otros gentiles, que andan en la vanidad de su mente, 18 teniendo el entendimiento entenebrecido, ajenos de la vida de Dios por la ignorancia que en ellos hay, por la dureza de su corazón; 19 los cuales, después que perdieron toda sensibilidad, se entregaron a la lascivia para cometer con avidez toda clase de impureza. 20 Mas vosotros no habéis aprendido así a Cristo, 21 si en verdad le habéis oído, y habéis sido por él enseñados, conforme a la verdad que está en Jesús. 22 En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, 23 y renovaos en el espíritu de vuestra mente, 24 y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad. 25 Por lo cual, desechando la mentira, hablad verdad cada uno con su prójimo; porque somos miembros los unos de los otros. 26 Airaos, pero no pequéis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo,

27 ni deis lugar al diablo. 28 El que hurtaba, no hurte más, sino trabaje, haciendo con sus manos lo que es bueno, para que tenga qué compartir con el que padece necesidad. 29 Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes.

30 Y no contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados para el día de la redención. 31 Quítense de vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería y maledicencia, y toda malicia. 32 Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo.

En realidad no tiene que ver con el diablo tener lugar "en o dentro" de nuestro cuerpo sino "con o por medio" de nuestra vida. El contexto nos declara que es principalmente por medio de las palabras corrompidas, la falta de unidad entre los hermanos en la congregación, conducta inapropiada e inconsecuente con el cristiano, la ira, la mentira, las falsas doctrinas, robos, etc. Los cristianos están llamados a vivir vidas santas y piadosas llenas del fruto del espíritu. El no hacerlo "dará lugar al diablo" para levantar acusación en contra de la iglesia, la doctrina y nuestras vidas.

El apóstol Santiago también nos da un mensaje similar cuando nos dice 'resistid al diablo y el huirá de vosotros'

Santiago 4

1 ¿DE dónde vienen las guerras y los pleitos entre vosotros? ¿No son de vuestras concupiscencias, las cuales combaten en vuestros miembros? 2 Codiciáis, y no tenéis; matáis y ardéis de envidia, y no podéis alcanzar; combatís y guerreáis, y no tenéis lo que deseáis, porque no pedís.3 Pedís, y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites.4 Adúlteros y adúlteras, ¿no sabéis que la amistad del mundo es enemistad con Dios? Cualquiera pues que quisiere ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios.

5 ¿Pensáis que la Escritura dice sin causa: Es espíritu que mora en nosotros codicia para envidia? 6 Mas él da mayor gracia. Por esto dice: Dios resiste á los soberbios, y da gracia á los humildes. 7 Someteos pues á Dios; resistid al diablo, y de vosotros huirá. 8 Allegaos á Dios, y él se allegará á vosotros. Pecadores, limpiad las manos; y vosotros de doblado ánimo, purificad los corazones. 9 Afligios, y lamentad, y llorad. Vuestra risa se convierta en lloro, y vuestro gozo en tristeza. 10 Humillaos delante del Señor, y él os ensalzará. 11 Hermanos, no murmuréis los unos de los otros. El que murmura del hermano, y juzga á su hermano, este tal murmura de la ley, y juzga á la ley; pero si tú juzgas á la ley, no eres guardador de la ley, sino juez. 12 Uno es el dador de la ley, que puede salvar y perder: ¿quién eres tú que juzgas á otro?

Pedro nos dice que el diablo anda como león rugiente buscando a quién devorar, pero devorará solamente aquellos que le dan lugar, que abren puertas en su vida y que no están preparados para la batalla. Por eso es que el apóstol nos insta a revestirnos del nuevo hombre y despojarnos del viejo hombre que está viciado conforme a deseos engañosos y a ser renovados en el espíritu de nuestra mente. (Efesios 4:22-23) Estos pasajes hablan de nuestra responsabilidad y deber Cristiano y hacemos bien en tomarlos en serio.

Nuestra lucha es contra el enemigo de la cruz de Cristo. En Efesios se nos dice que "no le demos lugar" La BLA dice que no le demos "oportunidad". Santiago insiste en que "resistamos al diablo". Pablo repite la idea de no dejar que el Satanás tome ventaja:

2 Corintios 2

10 Y al que vosotros perdonáis, yo también; porque también yo lo que he perdonado, si algo he perdonado, por vosotros lo he hecho en presencia de Cristo,11 para que Satanás no gane ventaja alguna sobre nosotros; pues no ignoramos sus maquinaciones.

El dar lugar al diablo ocurre cuando no damos el lugar a Dios. Cuando nos dejamos llevar por la conducta carnal y pecaminosa y nos hacemos disponibles para hacer la obra del diablo y en torno dañamos la doctrina de Cristo y la iglesia.

Vea la lista que nos trae la Escritura acerca de las maneras en que se le puede dar lugar al diablo: codicia, envidia, pleitos, mundanalidad (amistad con el mundo), soberbia, ira pecaminosa y extendida, orgullo, autosuficiencia, falta de humildad, falta de perdón, murmuración, juicio indebido a otros, jactancia, falta de hacer lo bueno (robar, mentir, etc.)

Fuente: Ministerio vidaeterna.com

Poema: Dios ayúdame a escribir

Dios ayúdame a escribir
un bello poema de amor,
donde pueda describir
cuan hermoso eres Señor.

En el quiero contar
de Tu gran fidelidad
y al mundo demostrar
cuan grande es Tu bondad..

Decirle al pecador
de Tu gracia sin igual,
donde ofreces real perdón
al que acepte Tu amistad.

Al cansado y trabajado
compartirles del descanso,
que hay en ti, Jesús amado;
Señor humilde y manso.

Expresar lo poderoso
que es caminar en Tu verdad,
fuente de supremo gozo
que nos da la libertad.

Porque Tu Palabra es viva
bien cortante y eficaz,
que sana toda herida
y destruye toda maldad.

Mostrarle a el mundo entero
cuan precioso eres Jesús,
eres Tú mi dulce dueño
que mi inundas con Tu luz.

Señor dame sabiduría
para poder claramente expresar,
lo hermoso que es la vida
cuando se te permite gobernar.

No hay problema que nos venza
ni dolor que nos destruye,
en Su amor El nos liberta
con Su gracia nos instruye.

Por eso en este poema
quiero a todos invitar
a que dejen su miseria,
rebeldía y vanidad,
y vengan y se entreguen
a Jesús el Rey Glorioso,
de quien sólo provienen
la vida, la paz y el gozo.

Autor: Desconocido

¿Una vida sin sentido?

¿Quién soy yo, o qué es mi vida?
1 Samuel 18:18.

«No veo por qué he de seguir viviendo; ¿qué sentido tiene? Por eso pongo fin a mi vida». Así se despidió un joven estudiante antes de quitarse la vida.

Es desesperante preguntarse por el sentido de la vida y no encontrar respuesta. Por eso muchos prefieren ignorar esa punzante pregunta y piensan: Ya que vivo, quiero disfrutar de la vida y buscar un buen trabajo, amigos, fiestas, diversiones, y cuando algo salga mal, entonces… Sí, ¿entonces qué?, ¿qué ocurrirá cuando uno se halle repentina e inesperadamente en el umbral de la eternidad, después de un accidente automovilístico, un choque de trenes, un terremoto, la caída de un avión, etc.?

La pregunta acerca del sentido de la vida es demasiado importante como para que nos atrevamos a eludirla, pues tenemos una única vida. Cuando nuestro tiempo se acabe en esta tierra, nuestra carrera aquí abajo habrá terminado definitivamente, pero nuestra existencia seguirá más allá. Dios, nuestro Creador, nos pedirá cuenta de nuestra vida terrenal.

Para cada ser humano existe la posibilidad de poner fin a la falta de sentido de su vida y de darle un nuevo comienzo con Jesucristo. Él nos invita: Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar (Mateo 11:28).

Yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia (Juan 10:10). Al que a mí viene, no le echo fuera (Juan 6:37).

Fuente: La Buena Semilla

miércoles, 28 de mayo de 2008

¿Cómo puedo hacer que Dios responda a mis oraciones?

Mucha gente ve una “oración contestada” cuando Dios accede a una petición de oración ofrecida a Él. Si la petición de oración no es concedida, con frecuencia es entendido como una oración no contestada. Sin embargo, esto es una comprensión incorrecta de la oración. Dios responde a cada oración que es elevada hacia Él. Lo que debemos recordar es que algunas veces Dios responde “no” o “espera” Dios solo promete concedernos nuestras oraciones cuando le pedimos de acuerdo a Su voluntad. 1 Juan 5:14-15 nos dice; “Y esta es la confianza que tenemos en Él, que si pedimos alguna cosa conforme a Su voluntad, Él nos oye. Y si sabemos que Él nos oye en cualquiera cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho.”

¿Qué significa pedir de acuerdo a Su voluntad? Orar de acuerdo a la voluntad de Dios es orar por cosas que traerán honra y gloria a Dios y/o orar por cosas que la Biblia revela claramente que es la voluntad de Dios que las obtengamos. Si oramos por algo que no es para honrar a Dios, o que no es la voluntad de Dios para nuestras vidas, Dios no nos dará lo que le pedimos. ¿Cómo sabemos cuál es la voluntad de Dios? Dios promete que nos dará sabiduría cuando se la pidamos. Santiago 1:5 dice; “Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada” Familiarízate con lo que dice la Biblia acerca de la voluntad de Dios para tu vida. Entre más entendamos la Palabra de Dios, mejor sabremos por lo que debemos orar. Entre más sepamos por lo que debemos orar, nuestra vida de oración será más efectiva.

Amor activo

Vestíos, pues, como escogidos de Dios, santos y amados,
de entrañable misericordia, de benignidad, de humildad,
de mansedumbre, de paciencia.
Y sobre todas estas cosas vestíos de amor,
que es el vínculo perfecto.
Colosenses 3:12 y 14.

Un joven había resultado gravemente herido en un accidente automovilístico. Durante su convalecencia en el hospital le impresionó mucho la actitud del ortopedista que lo atendía. Este médico se destacaba por sus particulares cualidades y méritos. Aunque estaba muy ocupado, nunca se impacientaba, y para todos tenía palabras amables. Además trabajaba más de lo que era estrictamente su deber. A veces volvía por la noche al hospital para ayudar a algún enfermo especialmente grave.

Cuando el joven se recuperó, tuvo que ir al consultorio del médico para una última revisión. Entonces lo miró inquisitivamente y le preguntó: –Doctor, ¿cuál es su secreto? Sea cual sea, yo también quisiera tenerlo. El ortopedista le contestó que era creyente y luego le contó su conversión a Jesucristo.

El joven vio en la vida de ese médico un verdadero amor cristiano, y esto lo condujo al Señor Jesús. Cuán importante es que nuestro prójimo pueda ver y sentir que el amor no es algo teórico, sino que se muestra por medio de hechos. ¡Qué hermoso sería si nuestra vida como cristianos dejara imborrables impresiones en los demás! ¡Es de desear que sepamos dar a los que nos rodean algo del amor y de la gracia que siempre experimentamos de parte de nuestro Señor, no sólo de vez en cuando, sino continuamente!

Fuente: La Buena Semilla

martes, 27 de mayo de 2008

Las Finanzas y tu Relación con Dios

En realidad, tenemos sólo un propósito para todo lo que hacemos en el tiempo de esta vida –glorificar a Dios-.

Si nuestra vida diaria no refleja ese servicio, no estamos sirviendo a Dios.

Hay una gran cantidad de servicio falso de parte de muchos que profesan servir a Dios pero en la realidad lo que pretenden es que Dios les sirva a ellos. Es verdad que ellos dan, pero siempre esperan que se les pague.

Ellos ayudarán al necesitado, pero es para que Dios no permita que ninguna tragedia le suceda a ellos. Esta lista se podría proseguir y, al hacerlo, sin duda algo se aplicaría a cada uno de nosotros. ¿por qué? Porque muy pocos, creo yo, entendemos la función que tienen las finanzas en nuestra vida espiritual.

Los principios financieros dados a través de toda la Palabra de Dios no están ahí para ver si nosotros somos lo suficientemente fuertes como para vivir conforme a ellos – fueron dados porque Dios sabe que son lo mejor para nosotros-.

Los principios de Dios acerca de las finanzas no son un conjunto de reglamentos arbitrarios mediante los cuales gobernamos. Estos representan la sabiduría de un Padre amante para aquellos que le oyen y confían en Él.

Nosotros hemos constituido una sociedad afluente basada en la arena movediza de una deuda futura. Todo lo que tenemos está en peligro de ser barrido por cualquier crisis financiera, aun relativamente pequeña. No será así con aquellos que observan y obedecen la sabiduría financiera de Dios; ésta edifica para que perdure, no para impresionar a otros.

¿Por qué Cristo enseñó acerca de las finanzas?

Muchos cristianos se sorprenden al descubrir que aproximadamente dos tercios de las parábolas que Cristo usó al enseñar tienen que ver específicamente con las finanzas.

La razón para esto es muy simple:

Él escogió un asunto con el cual casi todo el mundo está identificado.

Cristo nunca dijo que el dinero o las cosas materiales fueran problemas. Él sencillamente dijo que éstos eran síntomas de problemas reales. Él constantemente nos advirtió que guardáramos nuestros corazones de la avaricia, la codicia, el egoísmo y el orgullo, porque esas son las herramientas que usa Satanás para controlar y manipular este mundo.

By Sigueme.net

Desarrolla tu potencial

Las herramientas del carpintero

Nosotros somos colaboradores de Dios.
1 Corintios 3:9.

Las herramientas del taller de carpintería estaban conferenciando. A Martillo se le acababa de informar que debía irse, porque era demasiado ruidoso. Entonces dijo: –Si tengo que dejar la carpintería, Destornillador también debe irse; es tan insignificante que no se notará su ausencia.

El pequeño Destornillador se levantó y dijo: –Está bien, pero Tornillo también debe irse; es necesario darle vueltas y vueltas para ponerlo en su lugar. Entonces Tornillo opinó: –Si quieren me voy, pero Cepillo también debe irse; todo su trabajo se hace en la superficie, en él no hay profundidad.

A esto Cepillo replicó: –¡Está bien, pero Metro también debe partir, porque siempre está midiendo todo, como si sólo él fuera correcto. Entonces Metro se quejó de Papel de Lija, diciendo: –No me importa irme, pero él es más áspero de lo que debería ser y siempre está raspando de más.

En medio de la discusión entró el carpintero. Se acercó al banco de carpintería para hacer una mesa y para ello empleó todas las herramientas. Después que finalizó el trabajo del día, Serrucho se levantó y dijo: –Amigos, me doy cuenta de que todos somos útiles para realizar un buen trabajo.

Todas las acusaciones contra esas herramientas eran ciertas, sin embargo el carpintero empleó cada herramienta conforme al uso al que está destinada. Esta fábula, ¿acaso no nos ilustra que todos los creyentes somos útiles de un modo u otro en la obra de Dios? Él desea utilizar cada una de sus herramientas.

Fuente: La Buena Semilla

Cómo reconocer una Iglesia saludable?

¿Está usted en el proceso de buscar una iglesia? Eso puede ser un reto, ¿no es así? Muchos de nosotros tendemos a basarnos en cuatro factores para hacer nuestra elección: denominación, estilo de música, tamaño, y ubicación. Pero esos por sí solos no pueden decirle lo más importante: ¿es una iglesia saludable?
¿Cómo encuentra usted una iglesia saludable? Este artículo le dará a usted algunas ideas. Pero primero, y más importantemente, ore. Pídale al Señor que lo guíe en su búsqueda. Entonces, a medida que usted sigue Su dirección, manténgase sensitivo a las siguientes seis cualidades esenciales de una iglesia saludable.

#1: Dios obtiene la gloria
Los edificios pueden ser preciosos, los pastores pueden ser dotados, y la música puede ser maravillosa, pero lo más importante es que su corazón y su mente sean dirigidos hacia el Señor. Glorificar a Dios significa magnificarlo y exaltarlo; llamar atención a Su grandeza, a Su amor, a Su gracia. El salmista cristaliza esta verdad en su oración al Señor:
No a nosotros, Señor, no a nosotros,
sino a tu nombre da gloria,
por tu misericordia, por tu verdad. (Salmo 115:1)
Por alguna razón, es sorprendentemente fácil para nosotros atraer la atención hacia nosotros, ¿no es así? Magnificamos la personalidad de un pastor y exaltamos la brillantez de su sermón, y al hacer eso, nos volvemos un público ansioso que ha venido a ver a su estrella favorita actuar. Tristemente, Dios se vuelve un personaje de fondo en la actuación de alguien más. Eso no es lo que Su iglesia está destinada a ser.
La iglesia es el lugar donde las personas van a aprender acerca de la naturaleza de Dios y Su voluntad, para ser formados por Él a ser Su pueblo, y para profundizar su relación de amor con Él. Así que en una iglesia saludable, Dios es la "estrella", y la música y la predicación dirigen el centro de atención hacia Él.

#2: Jesucristo, el Hijo de Dios, es el centro
Sin Jesucristo y Su evangelio, no habría iglesia, porque no habría cristianismo. Glorificar a Dios también significa glorificar a Su Hijo, Jesucristo, que es "es el resplandor de su Gloria y la expresión exacta de su naturaleza" (Hebreos 1:3).
Entonces, una iglesia saludable es una iglesia centrada en Cristo. El evangelio de Jesucristo será preeminente, llevando al pueblo de Dios a regocijarse en la salvación de Cristo, descansar en Su perdón, seguir Su ejemplo, y obedecer Su enseñanza. Como el Padre ha "exaltado hasta lo sumo" a Su Hijo, así también debemos hacerlo nosotros (vea Filipenses 2:9-11).

#3: Dios es verdaderamente adorado
¿Ha usted visitado alguna vez una iglesia donde se leían las Escrituras, se cantaban cantos, y se predicaba un sermón, pero de alguna manera la adoración no estaba presente? Lo deja a usted sintiéndose como si estuviera vacío y desconectado del Señor, ¿no es así?

La adoración no puede ocurrir a no ser que el corazón esté envuelto. Una iglesia saludable adorará desde el corazón, buscando ser sensitiva a la impresionante presencia del Señor (vea el Salmo 95).

En una iglesia saludable, una que se reconoce con gratitud como "las ovejas de Su mano", usted debe poder sentir
  • una reverencia respecto a la Palabra del Señor,
  • alabanza sincera en la música tocada y cantada,
  • y deleite en el Señor y amor por Su pueblo en las palabras del sermón.
En una iglesia saludable, el amor por el Señor estará detrás de todo lo que se hace (vea 1 Corintios 13), atrayendo los corazones de las personas para que ellas puedan venir ante el Señor como una comunidad adoradora.

#4: La Palabra de Dios no es solo enseñada sino también aplicada
Una iglesia floreciente también se distingue por su devoción a aprender y vivir la Palabra de Dios. ¡Qué privilegio es para nosotros tener la Biblia! La propia revelación del Señor "inspirada por Dios" de Su naturaleza, Su corazón, Sus acciones, y Su voluntad (vea 2 Timoteo 3:16 NVI). Es emocionante entrar a su presencia a través de Su Palabra; o debe serlo. La oración del salmista puede hacer mucho para moldear nuestras expectativas: "Abre mis ojos, para que vea las maravillas de tu ley" (Salmo 119:18).
No es suficiente, sin embargo, contemplar Su Palabra y mantenerla guardada en nuestras mentes. Debemos vivirla, obedecerla, tener nuestras vidas moldeadas por ella. Jesús mismo enfatizó la importancia de aplicar Su enseñanza:
"Cualquiera que oye estas palabras mías y las pone en práctica, será semejante a un hombre sabio que edificó su casa sobre la roca; y cayó la lluvia, vinieron los torrentes, soplaron los vientos y azotaron aquella casa; pero no se cayó, porque había sido fundada sobre la roca." (Mateo 7:24-25)
El Señor nos ha dado Su Palabra para (1) enseñarnos sobre Sí Mismo, (2) mostrarnos el camino de la salvación y de la vida, (3) ayudarnos a crecer en sabiduría y hacernos maduros, (4) estabilizar nuestra fe en tiempos de pruebas, y (5) poder detectar y enfrentar el error, solo para nombrar algunas cosas.
Así que es crucial que la enseñanza de un pastor
  • esté basada en las Escrituras, no en libros populares o en sus propias opiniones o motivos de enfado,
  • sea personal en lugar de teórica, lo cual pudiera crear indiferencia,
  • sea relevante, mostrando cómo la verdad de Dios es tan aplicable para hoy en día,
  • sea balanceada con humildad, amor, y gracia, para evitar intolerancia y orgullo, y
  • Ser solamente el medio para conseguir un fin: conocer y adorar a Su autor, no a la Biblia misma.

#5: El amor de Dios puede ser visto y sentido
Compasivo… bondadoso… humilde… manso… paciente… perdonador… amoroso. Estas son las cualidades por las cuales Dios quiere que Su pueblo sea conocido, porque estas cualidades reflejan quién es Él (vea Colosenses 3:12-14). ¿Recuerda usted la última conversación de Jesús con sus discípulos en el aposento alto? Después de lavar sus pies con humildad y mansedumbre, Jesús les dijo, "Un mandamiento nuevo os doy: que os améis los unos a los otros; así como yo os he amado … En esto conocerán todos que sois mis discípulos" (Juan 13: 34a, 35a).

Entonces, una iglesia saludable será distinguida por la atención y la empatía de sus miembros unos por otros. Se sentirá como una familia en lugar de una corporación. Y rebozará un cálido espíritu de bienvenida que libremente comparte el regalo de la gracia de Dios.

#6: Las buenas nuevas de Dios les serán expresadas a otros
La iglesia del Señor no es un club campestre exclusivo que disfruta en un resplandor de gloria privada, sino es "una ciudad situada sobre un monte" y "la luz del mundo" que llama a las personas "de las tinieblas a su luz admirable" (Mateo 5:14; 1 Pedro 2:9). Al igual que Jesús vino "a buscar y a salvar lo que se había perdido" (Lucas 19:10), así es nuestro llamado ahora de buscar a los perdidos y decirles del Salvador.
Así que una iglesia saludable estará activamente preocupada por el mundo fuera de sus paredes. Orará por aquellos que no conocen el amor de Dios o se han alejado de Él. Alentará y entrenará a su gente (sin presionar) a expresar su fe a otros; ya bien sea en su trabajo cotidiano u ofreciendo ayuda a los necesitados en su comunidad. Y les enseñará a tratar a los incrédulos con respeto, manteniendo su dignidad y permitiendo que el Espíritu Santo obre en ellos a Su manera y en Su tiempo.

Cuando usted encuentra una iglesia con estas seis cualidades, ¡usted ha avanzado mucho para encontrar una iglesia saludable! Para mayor guía espiritual en su búsqueda, por favor lea los pasajes a continuación. Y Dios lo bendiga en su búsqueda para encontrar su iglesia.

Salmo 29
Corintios 1:3-4
Salmo 105
Efesios 1:22-23; 4:1-6, 11-16
Salmo 119:9-16, 97-104
Filipenses 2:1-11
Juan 4:23-24
1 Tesalonicenses 2:3-13
Hechos 2:43-47
Hebreos 13:15-17
Romanos 12
Apocalipsis 2-3

Los instrumentos de Dios

Abres tu mano,
y colmas de bendición a todo ser viviente.
Salmo 145:16.

Un creyente que murió hace tiempo, a la edad de 94 años, nos contó un suceso que ocurrió en Escocia en una época de gran pobreza. Una anciana oraba en su pequeña casa pidiendo al Señor que le mandara pan. Unos muchachos que pasaban por allí la vieron arrodillada y se acercaron para oír lo que decía. Entonces se les ocurrió ir a la aldea y comprar un gran pan; luego subieron al techo de la choza y lo arrojaron por la chimenea.

Cuando la mujer oyó caer el pan, se levantó, lo tomó y lo puso sobre la mesa. Luego volvió a arrodillarse y agradeció a Dios por haber oído su oración.

Fuera, los muchachos no querían renunciar al reconocimiento de su «buena obra» y gritaron en alta voz: –¡Abuela, no fue el Señor, fuimos nosotros! –No, no, repuso ella, el Señor me lo mandó, aun cuando fueron ustedes quienes me lo trajeron.

Tenía razón, Dios impulsó a los muchachos a obrar, aun cuando no lo entendieron. Los milagros que Dios hace rara vez son de índole sobrenatural. Sus medios son ilimitados y a menudo emplea a personas que no tienen ni idea de que son su instrumento en ese momento. También utiliza circunstancias que muchos llaman casualidad. Sólo a quienes viven con Dios y le confían todo, se les abren los ojos. Así pueden agradecerle por su intervención, y la gratitud enriquece interiormente al ser humano más que cualquier riqueza material.

Bendito el Señor; cada día nos colma de beneficios (Salmo 68:19).

Fuente: La Buena Semilla

Derrotemos a los gigantes‏

“También vimos allí gigantes, hijos de Anac, raza de los gigantes, y éramos nosotros, a nuestro parecer, como langostas; y así les parecíamos a ellos”
( Números 13:33)


¡Gigantes, gigantes, gigantes! por todos lados vemos gigantes, no vamos a negar su existencia porque prácticamente, desde que nacemos los estamos viendo:
-Gigante el reto para aprender a caminar
-Gigante el reto para asistir a la escuela
-Gigante el reto para manejar la bicicleta

Pasan los años, y los gigantes van siendo otros:

-Gigante formar un hogar
-Gigante sostener ese hogar
-Gigante las enfermedades
-Gigante de los vicios
-Gigante el problema de los hijos que se rebelan
-Gigante las dificultades financieras

Si tú observas esos gigantes, llegan a la vida de todas las personas, dentro del mundo de los vivientes, pero de una u otra forma, venciendo o siendo vencidos, la rueda de la vida continúa.
Ahora analicemos lo que estaba pasando cuando los espías que había enviado Moisés para reconocer la tierra, dieron en su reporte, el informe de que había muchos gigantes, diez de ellos dijeron que sería imposible entrar a la tierra prometida y dos dijeron que Jehová les daría la tierra.
Los gigantes eran reales, existían y vivían en la tierra prometida, la cual no iban a entregar fácilmente y la defenderían a costa de su propia sangre.
Pensemos por un momento que hacía unos cuantos días, el pueblo de Israel, en el desierto, no vio gigantes, pero en la tierra prometida sí había gigantes, esos que tú y yo vemos también en nuestra propia tierra prometida.
¡Ahora sí estamos entrando en tema!, porque te das cuenta que es cierto, te percatas que cuando estabas en el mundo dominabas cualquier situación, ya fuera con tus fuerzas o con tus influencias, y ¿sabes porque?, porque los demonios eran tus aliados y los gigantes no te ofrecían ningún tipo de resistencia, por el contrario, te daban poder para avanzar aún destrozando el alma de los demás, engañando y demostrando que tú podías avanzar, aún pisoteando a los que se te opusieran.
Cuando ingresaste al rebaño de Cristo, todo cambió, porque el infierno mismo y todo el sistema organizado de las tinieblas se vino en contra tuya, y entre más ofrecías tu vida al servicio de Dios, la oposición se aumentaba más y más, entre más fiel y obediente a Dios eras, más gigantes aparecían también, pero inmediatamente, Dios abría camino para que avanzaras hacia delante.
Lo que te sucede, Dios lo sabe, y también sabe el tipo de gigante que tienes al frente, porque ahora, los gigantes son invisibles, y tratan cada día, de hacerte caer y dejarte destruido e inútil, para que ya no puedas estropear sus planes y para que no seas de bendición a otras personas.
El conflicto contra los gigantes es a diario. Recuerda que cuando el apóstol pablo aún no tenía a Cristo en su corazón, nadie lo perseguía, era un hombre muy importante en Israel y él era el perseguidor, pero cuando abre su corazón a Cristo, su vida pasó los mas grandes peligros, naufragios, persecuciones, prisiones y amenazas.
¿ Quien es tu gigante?
¿Hogar con dificultades; pobreza, miseria, enfermedades, desaliento, desempleo?
Estos gigantes tienen acorralados a millones de personas, pero si tú crees en Dios y le obedeces, los gigantes serán destruidos, serán derribados y huirán de tí. Si te sientes mal herido, golpeado y ultrajado, alza tus ojos a Cristo y pronuncia lo siguiente:
“Aun tengo vida, la esperanza en Dios está en mi corazón, la batalla no ha terminado, no estoy vencido, no acepto la derrota, reconozco que estoy lastimado, pero con el poder de Dios en mi vida, los gigantes serán destruidos, Dios vendrá a mi vida, y me dará la gran oportunidad que he estado esperando, ningún gigante me derrotará, Dios me levantará, y me dará la corona como vencedor”

Reflexion escrita por Por Dr. Jose Luis G.
detallitoscristianos.com

lunes, 26 de mayo de 2008

¿Cuál es la importancia del bautismo cristiano?

El bautismo cristiano de acuerdo con la Biblia, es un testimonio externo de lo que ha ocurrido internamente en la vida de un creyente. Este ilustra la identificación de un creyente con la muerte de Cristo, Su entierro y Su resurrección.

La Biblia declara, “¿Acaso no saben ustedes que todos los que fuimos bautizados para unirnos con Cristo Jesús, en realidad fuimos bautizados para participar en Su muerte? Por tanto, mediante el bautismo fuimos sepultados con él en Su muerte, a fin de que, así como Cristo resucitó por el poder del Padre, también nosotros llevemos una vida nueva” (Romanos 6:3-4 NVI). En el bautismo cristiano, la acción de ser sumergido en el agua, representa ser sepultado con Cristo. La acción de salir del agua representa la resurrección de Cristo.

En el bautismo cristiano deberían haber dos requisitos antes de que una persona sea bautizada: (1) la persona que está siendo bautizada debe haber confiado en Jesucristo como Salvador, y (2) la persona debe entender lo que significa el bautismo. Si una persona conoce al Señor Jesús como Salvador, entiende que el bautismo cristiano es un paso de obediencia al proclamar públicamente su fe en Cristo, y su deseo de ser bautizado – entonces no hay razón para impedir de ser bautizado al creyente.

De acuerdo con la Biblia, el bautismo cristiano es simplemente un paso de obediencia, una proclamación pública de la fe que uno profesa en Cristo solamente para salvación. El bautismo cristiano es importante porque es un paso de obediencia – una declaración pública de la fe en Cristo y compromiso con El, una identificación con la muerte de Cristo, Su entierro y Su resurrección.

Video Reflexion: ¿Para que estoy aqui en la tierra? - Una vida con proposito

Jesucristo, la Verdad personificada

Le dijeron: ¿Tú quién eres?
Entonces Jesús les dijo: Lo que desde el principio os he dicho.
Juan 8:25.

He venido al mundo,
para dar testimonio a la verdad.
Juan 18:37.

El Señor Jesús nunca hablaba ni obraba fuera de la dependencia de su Padre y sin la espontánea sumisión a la voluntad divina. De esa manera cada palabra y cada acto suyo eran la revelación y la representación del Padre que le había enviado. Por un lado, esto demuestra la magnífica perfección de nuestro Señor, y por otro, se ve el triste contraste con nuestra propia imperfección.

Así como él era divinamente perfecto, también lo eran sus palabras y sus obras. No había diferencia entre sus dichos, hechos y obras. Por eso cuando los judíos le preguntaron: ¿Tú quién eres?, él contestó: Lo que desde el principio os he dicho. Él era la verdad, hablaba la verdad y la manifestaba; o dicho de otro modo, él era la verdad en persona.

A menudo nuestras palabras no son veraces o no contienen toda la verdad, o al contrario, van más allá de ella. ¡Cuántas veces deshonramos al Señor por este motivo! En cambio cada palabra del Señor Jesús era la verdad, por eso era al mismo tiempo un rayo de su gloria personal y una revelación del Padre. Y este también era el caso para cada una de sus obras. Por eso pudo decir: Las palabras que yo os hablo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que el Padre que mora en mí, él hace las obras (Juan 14:10).

¡Qué privilegio de tener a un Amigo tan veraz!

Fuente: La Buena Semilla

Reflexion: Se nota

--Ese hombre ha estado en el ejército, o en un colegio militar –le dije en cierta ocasión a un amigo.

--Efectivamente; pero ¿Cómo lo supo?

--Por su manera de caminar.

Es así con nosotros. Podrán saber si hemos estado con Jesús, por nuestra manera de andar.

1 Timoteo 4:12
"Ninguno tenga en poco tu juventud; pero sé ejemplo de los fieles en palabra, en conversación, en caridad, en espíritu, en fe, en limpieza"


Tito 2:7-8
"Mostrándote en todo por ejemplo de buenas obras; en doctrina haciendo ver integridad, gravedad, Palabra sana, e irreprensible; que el adversario se avergüence, no teniendo mal ninguno que decir de vosotros."

Fuente: Renuevo de Plenitud

Reflexion: Ejemplo

Cuentan que un padre de familia fue a un parque de diversiones con sus dos hijos, uno de tres años de edad y otro de 6 años. La entrada valía cinco dólares para niños menores de 5 años y diez para los mayores de 5 años.
Cuando se acercó a la entrada, el boletero le preguntó la edad de los niños.
El hombre respondió "Tres y seis años".

El boletero le replicó: Usted es un tonto?. Me ha podido decir que tiene tres y cinco años y pagar
sólo la tarifa de cinco dólares. Ahora que me dijo la verdadera edad de sus hijos, tendré que cobrarle más. Acaso alguien se habría dado cuenta ?.

El padre le respondió: "Sí, mis hijos".

sábado, 24 de mayo de 2008

De ti depende

Unos obreros estaban picando piedras frente a un enorme edificio en construcción. Se acercó un visitante a uno de los obreros y le preguntó:
-¿Qué están haciendo ustedes aquí?

El obrero lo miró con dureza y le respondió:

-¿Acaso usted está ciego para no ver lo que hacemos? Aquí, picando piedras como esclavos por un sueldo miserable y sin el menor reconocimiento. Vea usted ese mismo cartel. Allá ponen los nombres de Ingenieros, Arquitectos, pero no ponen los nuestros que somos los que trabajamos duro y dejamos en la obra el pellejo.

El visitante se acercó entonces a otro obrero y le preguntó lo mismo.

-Aquí, como usted bien puede ver, picando piedras para levantar este enorme edificio. El trabajo es duro y está mal pagado, pero los tiempos son difíciles, no hay mucho trabajo y algo hay que hacer para llevar la comida a los hijos.

Se acercó el visitante a un tercer obrero y una vez más le preguntó lo que estaba haciendo. El hombre le contestó con gran entusiasmo:

-Estamos levantando un Hospital, el más hermoso del mundo. Las generaciones futuras lo admirarán impresionados y escucharán el entrar y salir constante de las ambulancias, anunciando el auxilio de Dios para los hombres. Yo no lo veré terminado, pero quiero ser parte de esta extraordinaria aventura.

El mismo trabajo, el mismo sueldo, la misma falta de reconocimiento; una misma realidad. Tres maneras distintas de vivirla: como esclavitud; como resignación; como pasión, aventura y desafío.

Depende de tí que haces cada mañana, cuando te levantas.
Tenemos la elección; Podemos pasar el día quejándonos, repasando la dificultad que tenemos con la cosas que no funcionan, o salir de la cama y estar agradecido por las que sí funcionan".

Vivamos con ilusión, convirtamos el trabajo en una bendición, sintámonos parte de la extraordinaria obra planteada por el Ingeniero Supremo..!

Colosenses 3:23
Y todo lo que hagáis, hacedlo de ánimo, como al Señor, y no á los hombres.


Gálatas 6:7 "No os engañeis: Dios no puede ser burlado: que todo lo que el hombre sembrare, eso también segará."

Renuevo de Plenitud

La Trinidad

En él (en Cristo) habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad.
Colosenses 9:9.

Mientras los pueblos paganos representan a la divinidad bajo muchas formas, la Palabra, tanto el Antiguo como el Nuevo Testamento, nos enseña la fe en un solo Dios (véase Deuteronomio 6:4; 1 Timoteo 2:5).

La Escritura nos dice que Dios es un ser que se reveló en tres personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo. Esta es la razón por la cual, como cristianos, hablamos de la Trinidad, aunque esta expresión no se encuentra en la Biblia. La palabra «persona» tampoco se emplea para designar a Dios. Por eso no queremos tratar de explicar cuál es el «ser» de Dios, sino sólo aludir a él con la expresión «persona», lo que la Palabra de Dios expone en varios lugares, ya que tanto el Padre como el Hijo y el Espíritu Santo piensan, quieren, hablan y obran.

En el Antiguo Testamento se insinúa la divina Trinidad, aunque no se revela claramente (por ejemplo en Génesis 1:26; Salmo 110:1; Isaías 9:6). Pero cuando Jesús fue bautizado en el Jordán, las tres personas de la Deidad aparecieron juntas (Mateo 3:16-17). Esta revelación de Dios por medio de Jesucristo corresponde a la fórmula que Jesús dio a sus discípulos cuando los envió a bautizar en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

El Nuevo Testamento declara que el Padre envió a su Hijo a este mundo, y que el Padre y el Hijo enviaron al Espíritu Santo a la tierra. A ese respecto no se puede deducir una diferencia de rango o de jerarquía en el seno de la Deidad, expresión utilizada en Colosenses 2:9. Bástenos saber que Dios es Padre, Hijo y Espíritu Santo.

Fuente: La Buena Semilla


viernes, 23 de mayo de 2008

Busca al Señor


No lograrás gran cosa para el Señor
si te esfuerzas por hacerlo todo
apoyado en la fuerza carnal y en ti mismo,
en lugar de detenerte y pensar:
"Veamos, Dios, ¿qué quieres Tú que haga?"
Uno de los mayores problemas que tenemos casi todos
es sacar conclusiones precipitadas
y tomar decisiones repentinas e irreflexivas
sin aguardar al Señor.
¡Así que no te precipites a actuar
con tus propias fuerzas,
impacientemente y olvidándote de orar!
¡Busca al Señor!
No saques conclusiones rápidas, pensando:
"Pues claro, es evidente que tenemos que hacer esto".

Pregúntale al Señor y asegúrate primero.

¡Y recuerda que Dios casi nunca está apresurado!

Sus mayores obras toman tiempo.
Dios demora en hacer crecer una flor,
y hasta para pintar un atardecer
Así que cuando no estés convencido de algo
y no hayas comprobado que sea voluntad de Dios,
lo mejor que puedes hacer es aguardar
a que el Señor te lo revele de alguna manera.

"¡Aguarda al Señor, cobra ánimo y aliénta ese tu corazón!

Porque los que esperan al Señor
tendrán nuevas fuerzas",
¡en vez de agotarse!

"Levantarán alas como las águilas.
Porque los que han creído
han entrado en el reposo."
(Sal.27:14; Isa.40:31; Heb.4:3)

Dios cambia todas las circunstancias

Por muchos años el rumor cristalino del agua al chocar con las piedras alegró las noches frías en proximidades a Jericó, cuando los hombres se sentaban a la puerta de sus casas y las mujeres se movían de un lado a otro, atareadas en sus quehaceres. Los niños jugaban en algún rincón y todos esperaban, con miradas furtivas hacia la hornilla, en qué momento estaría la cena. Todo en la ciudad giraba en torno a esa fuente de agua que refrescaba y traía vida...
Sin embargo un día, el que menos pensaron y no marcaron en el calendario porque antes que recuerdos gratos evocaba malos momentos, alguien se enfermó. Otro más le siguió y pronto se convirtió en una epidemia.
No solo dejaron de beber sus aguas sino que pronto la tierra experimentó un cambio que golpeó la economía. Dejó de producir. Abundó la esterilidad. Nada se cosechaba.
--Creo que será mejor buscar una nueva ciudad—comentó un anciano al mirar con tristeza de qué manera y sin poder evitarlo, se iban los buenos tiempos. La sequía del territorio era evidente y el agua, aunque seguía avanzando con una fuerza inusitada, la misma que acompañó por siglos aquél riachuelo, no era fuente de provisión.
--Todos estamos de acuerdo, nuestra pregunta es, ¿adónde iremos?—dijo otro mientras limpiaba el sudor que perlaba su frente. Las cosas iban de mal en peor.
Por aquél tiempo llegó Eliseo. Muchos habían oído de su trabajo junto a Elías.
No era un desconocido, por el contrario, le rodeaba una aureola de historias sobre la santidad y consagración a Dios que le caracterizaban.
"Y los hombres de la ciudad dijeron a Eliseo: He aquí, el lugar en donde está colocada la ciudad es bueno, como mi señor ve; mas las aguas son malas, y la tierra es estéril. Entonces él dijo: Traedme una vasija nueva, y poned en ella sal. Y se la trajeron." (2 Reyes 2: 19, 20).

La fe es el secreto
Cuando todo parece acabar y hay quienes sienten que llegaron al final del camino, que el callejón se cierra, que el laberinto se hace más y más largo, es cuando debe aflorar la fe en nuestras vidas. ¿Fe en qué o en quién? Fe en Dios.
La certeza de que por difíciles que parezcan las circunstancias, pueden cambiar cuando abrimos las puertas para Su obrar divino.
Nada podía resolver el problema que enfrentaban. Humanamente era imposible. Sin embargo, ante la presencia de un siervo del Señor, aquellos hombres se decidieron a creer por encima de sus razonamientos humanos. No dudaron nada, por el contrario, se limitaron a permitir que el Supremo Hacedor tomara el control de las cosas.
Igual con el problema que usted enfrenta. Es probable que todos alrededor hayan expresado su desánimo y estén empeñados en sembrarle desesperanza. La decisión está en sus manos. Acepta las voces derrotistas o vuelve la mirada a Dios...
Obrar en fe, un principio de victoria Creer por encima de las circunstancias fue el principio de victoria y de milagros que asumieron Eliseo y los moradores de Jericó.
"Y saliendo él a los manantiales de las aguas, echó dentro la sal, y dijo: Así ha dicho Jehová: Yo sané esta agua, y no habrá más en ellas muerte ni enfermedad. Y fueron sanas las aguas hasta hoy, conforme la palabra que habló Eliseo" (2 Reyes 2:21, 22).
Es probable que todo a su alrededor luzca ensombrecido. La ciencia le falló, los seres humanos le fallaron, hasta usted mismo ha sentido arranques de derrota.
Sin embargo las cosas puede cambiar. Ese viraje en la situación se produce cuando volvemos la mirada a Dios y clamamos por un milagro.
No solo puede ocurrir, sino que ocurrirá... Recuerde que no depende de Dios, porque El gustosamente quiere manifestarse en su vida. Depende de usted, que deje de lado toda sombra de escepticismo y rechace toda voz de derrota a su alrededor, y confíe plenamente en Aquél que todo lo puede. ¿Cómo hacerlo? En oración. El amado Dios y Padre responderá...
Persevere, siga adelante, no vuelva la mirada atrás. Los milagros ocurrirán...

Fernando A. Jiménez .
adorador.com

¿Cuál es el don de hablar en lenguas?

El primer acontecimiento de hablar en lenguas se produjo en el Día de Pentecostés, lo encontramos en el libro de los Hechos 2:1 al 4. Los apóstoles salieron y compartieron el Evangelio con las multitudes, hablándoles en su propia lengua, “¡Les oímos hablar en nuestras lenguas las maravillas de Dios!” (Hechos 2:11). La palabra griega “lenguas” traducida, literalmente significa “idiomas”. Por tanto, el don de lenguas es hablar en un idioma que una persona no conoce, a fin de ministrar a alguien que habla ese idioma. En 1ª Corintios capítulos 12 al 14, donde Pablo habla de dones milagrosos, comenta, “Ahora pues, hermanos, si yo voy a vosotros hablando en lenguas, ¿qué os aprovechará, si no os hablase con revelación, o con ciencia, o con profecía, o con doctrina?” (1ª Corintios 14:6). De acuerdo con el Apóstol Pablo, y de acuerdo con las lenguas descritas en Hechos, hablar en lenguas es valioso para aquel que escucha el mensaje de Dios en su propio idioma, pero es inútil para todos los demás - a menos que sea interpretado / traducido.

Una persona con el don de interpretar lenguas (1ª Corintios 12:30) podría entender lo que uno que habla en lenguas está diciendo, aunque no conozcan el idioma que está siendo hablado. El intérprete de las lenguas comunicaría entonces el mensaje del que habla en lenguas a todos los demás, de manera que todos pudieran entender. “Por lo cual, el que habla en lengua extraña, pida en oración poder interpretarla” (1ª Corintios 14:13). La conclusión de Pablo en cuanto a lenguas no interpretadas es poderosa, “Pero en la iglesia prefiero hablar cinco palabras con mi entendimiento, para enseñar también a otros, que diez mil palabras en lengua desconocida” (1ª Corintios 14:19).

¿Es el don de lenguas para hoy en día? 1ª Corintios 13:8 menciona que cesa el don de lenguas, aunque asocia la cesación con la llegada de lo “perfecto” en 1ª Corintios 13:10. Algunos apuntan a una diferencia en el idioma en profecía y conocimiento en “cesando” con las lenguas “siendo cesadas”, como evidencia para cesar las lenguas antes de la llegada de lo “perfecto”. Mientras sea posible, esto no es explícitamente claro a juzgar por el texto. Algunos también apuntan a los pasajes tales como Isaías 28:11 y Joel 2:28-29 como una evidencia de que hablar en lenguas era una señal del juicio venidero de Dios. 1ª Corintios 14:22 describe las lenguas como una “señal para los incrédulos”. De acuerdo con este argumento, el don de lenguas era una advertencia para los judíos, de que Dios iba a juzgar a Israel por rechazar a Jesucristo como Mesías. Por tanto, cuando Dios de hecho juzgó a Israel (con la destrucción de Jerusalén por los Romanos en el año 70 A. de C.), el don de lenguas dejaría de servir para su propósito deseado. Mientras este punto de vista es posible, el propósito principal de las lenguas, que ha sido llevado a cabo, no necesariamente demanda su cesación. La Escritura no afirma concluyentemente, que el don de hablar en lenguas ha cesado.

Al mismo tiempo, si el don de hablar en lenguas estuviera activo en la iglesia de hoy en día, éste sería ejecutado de acuerdo con la Escritura. Sería un idioma real y comprensible (1ª Corintios 14:10). Tendría el propósito de comunicar la Palabra de Dios con una persona que habla otro idioma (Hechos 2:6-12). Sería en acuerdo con el mandato que Dios dio a través del Apóstol Pablo, “Si habla alguno en lengua extraña, sea esto por dos, o a lo más tres, y por turno; y uno interprete. Y si no hay intérprete, calle en la iglesia, y hable para sí mismo y para Dios (1ª Corintios 14:27-28). También debe ser en obediencia a 1ª Corintios 14:33, “Pues Dios no es Dios de confusión, sino de paz. Como en todas las iglesias de los santos”.

Dios definitivamente puede dar a una persona el don de hablar en lenguas para facilitar la comunicación con una persona que habla otro idioma. El Espíritu Santo es soberano en la distribución de los dones espirituales (1ª Corintios 12:11). Solamente imagínese cuánto más productivos podrían ser los misioneros si no tuvieran que ir a una escuela de idiomas, e instantáneamente fueran capaces de hablar a la gente en su propio idioma. Sin embargo, Dios no parece estar haciendo esto. Las lenguas no parecen ocurrir hoy en día en la forma que lo hacían en el Nuevo Testamento, a pesar del hecho de que sería sumamente provechoso. La vasta mayoría de creyentes que demandan practicar el don de hablar en lenguas, no lo hacen en acuerdo con la Escritura mencionada arriba. Estos hechos conducen a la conclusión de que el don de lenguas ha cesado, o es al menos una rareza en el plan de Dios para la iglesia hoy.

Aquellos que creen en el don de lenguas como un “lenguaje de oración” para edificación propia, obtienen su punto de vista de 1ª Corintios 14:4 y/o 14:28, “El que habla en lengua extraña, a sí mismo se edifica; pero el que profetiza, edifica a la iglesia”. Por todo el capítulo 14, Pablo está enfatizando la importancia de tener interpretadas (traducidas) las lenguas, vea 14:5-12. Lo que Pablo está diciendo en el capítulo 4 es, “Si usted habla en lenguas sin interpretación, no está haciendo nada más que edificarse a sí mismo, apareciendo más espiritual que otros. Si usted habla en lenguas y las interpreta, usted edifica a todos”. El Nuevo Testamento en ningún lugar da instrucciones específicas sobre “orar en lenguas”. En ningún lugar en el Nuevo Testamento da un propósito de “hablar en lenguas”, o describe específicamente a una persona “orando en lenguas”. Además, si “orar en lenguas” es para edificación propia, ¿no sería eso injusto para aquellos que no tienen el don de lenguas y quienes por tanto no están en capacidad de edificarse a ellos mismos? 1ª Corintios 12:29-30 claramente indica que no todos tienen el don de hablar en lenguas.

jueves, 22 de mayo de 2008

La Victoria esta garantizada

“Y todo aquel que invocare el nombre de Jehová será salvo; porque en el monte de Sion y en Jerusalén habrá salvación, como ha dicho Jehová, y entre el remanente al cual él habrá llamado”
( Joel 2:32 )

¡Gracias Santo Dios de Israel y del universo entero!
Por darnos esta promesa hermosa:
“Y todo aquel que invocare el nombre de Jehová será salvo”
Lo dice claramente:

“Y todo aquel”

¡ Oh, maravillosa gracia de Dios!

Yo hé invocado tu Santo nombre, por lo cual, soy salvo en todos los aspectos, me das la vida eterna y me salvas de todos mis problemas, ya no temeré a lo que me pueda hacer el hombre, sé que desde que te invoqué y pedí tu ayuda, me has escuchado, ahora declaro que tu promesa será cumplida en mi vida, la atesoro en mi corazón, pongo la bandera de Cristo en mi casa, soy de su propiedad, él es mi jefe y mi pastor, yo soy su hijo y su ovejita amada.
Dios tiene solamente buenos pensamientos para mi y me dará grandes provisiones para toda mi familia.
Los dias de la prueba han pasado, Dios estuvo en el control de todo, él estuvo detrás de la espada y del horno, controló a las tinieblas para que no me devoraran y puso mis pies sobre la roca, me llevó a los lugares altos y todo mi ser, entonará cánticos de júbilo y de accion de gracias.



Oración:


Santo, Santo, Santo, y amoroso Dios soberano,
ahora es el momento de darte las gracias por habernos salvado
y por darnos la promesa de la salvación
para todo aquel que invoque tu Santo nombre.
Te rogamos que ayudes y fortalezcas a todos los que
continúan en el proceso de las pruebas,
para que no desistan y logren llegar a la meta.
Gracias amado Dios, porque siempre respondes
a nuestras oraciones,
en el nombre de Cristo Jesus, amen y amen
L'image “http://cerinde.c.e.pic.centerblog.net/x87biwic.gif” ne peut être affichée car elle contient des erreurs.

El antídoto más eficaz: la oración

(El Señor dijo a los setenta a quienes envió:)
En cualquier casa donde entréis…
posad en aquella misma casa,
comiendo y bebiendo lo que os den;
porque el obrero es digno de su salario.
Lucas 10:5, 7.

Después de un día de camino, un pequeño equipo de predicadores del Evangelio llegó a una aldea de Indonesia, conocida por sus prácticas de ocultismo. Se les dio comida, pero cada uno se preguntaba: ¿No estarán envenenados estos alimentos? Mas uno de ellos dijo: –Jesús mandó dar testimonio y comer todo lo que sea ofrecido; confiemos, pues, en él. La comida fue precedida y seguida por varias oraciones. De repente, un aldeano vino a avisarles: –Sus alimentos fueron envenenados por el gran brujo. ¡Antes de que salga el sol, todos ustedes estarán muertos! Estos creyentes se arrodillaron y oraron fervientemente para que Dios interviniera y hablara a ese pueblo atado por el miedo y la esclavitud de Satanás.

Hacia las cuatro de la mañana, un hombre completamente desesperado surgió de la sombra. Presa de una extrema angustia, se echó a los pies de los misioneros, rogándoles: –¡Sálvenme! ¡Sálvenme! Soy el brujo y sé que si ustedes no están muertos cuando salga el sol, soy yo el que va a morir. La mala suerte se volverá contra mí. ¡Tengan piedad! Díganme, ¿qué debo hacer para ser salvo?

El brujo obtuvo la misma respuesta dada en Hechos 16:31 por Pablo y Silas al carcelero de Filipos: Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo. Este versículo produjo el mismo resultado: creyó en Jesús. Actualmente hay muchos cristianos en esta región de Indonesia.

Fuente: La Buena Semilla