viernes, 31 de octubre de 2008

El milagro de una canción

Como cualquier buena mamá, cuando Karen supo que estaba esperando un bebe, hizo lo que pudo para ayudar a su hijo Michael de tres años a prepararse para una nueva etapa en su vida.

Supieron que el nuevo bebe iba a ser una niña, y día y noche, Michael le cantaba a su hermanita en el vientre de su madre. El estaba encariñándose con su hermanita aun antes de conocerla. El embarazo de Karen progresó normalmente. A tiempo empezó su labor de parto, pero una complicación se presento de repente y Karen tuvo horas de labor de parto. Finalmente, después de muchas horas de lucha, la hermanita de Michael nació, pero en muy malas condiciones. La llevaron inmediatamente en una ambulancia a la Unidad de Cuidados Intensivos, sección neonatal del Hospital St.Mary, en Knoxville, Tennessee.

Los días pasaron y la niña empeoraba. Los pediatras tuvieron que decirle finalmente a los padres las terribles palabras “Hay muy pocas esperanzas, prepárense para lo peor”.

Karen y su esposo contactaron al cementerio local para apartar un lugar para su hijita. Ellos habían creado un cuarto nuevo para su hija y ahora se encontraban haciendo arreglos para un funeral. Sin embargo, Michael, les rogaba a sus padres que le dejaran ver a su hermanita “Quiero cantarle”, decía una y otra vez. Estuvieron dos semanas en Terapia Intensiva y parecía que el funeral vendría antes de que acabara la semana.

Michael siguió insistiendo que quería cantarle a su hermanita, pero le explicaban que no se permitía la entrada de niños a Terapia Intensiva.

De pronto Karen se decidió, llevaría a Michael a ver a su hermanita, la dejaran o no! Si no veía a su hermanita en ese momento, tal vez no la vería viva nunca.

Ella le puso un overol inmenso y lo llevo a Terapia Intensiva, Michael parecía una enorme canasta de ropa sucia. Pero la jefa de enfermeras se dio cuenta de que era un niño y se enfureció… “Saquen a ese niño de aquí ahora mismo! No se admiten niños aquí!”

El carácter fuerte de Karen afloro y, olvidándose de sus lindos modales de dama, que siempre la habían caracterizado, miro con ojos de acero la enfermera, sus labios eran una sola línea y con firmeza dijo: “El no se va hasta que le cante a su hermanita” y levanto a Michael y lo llevo a la cama de su hermanita.

El miro a la pequeñita, perdiendo la batalla por conservar la vida. Después de un momento empezó a cantar con la voz que le salía del corazón de un niño de tres años. Michael le canto: ” Eres mi luz del sol, mi única luz, tu me haces feliz cuando el cielo es gris….” (conocida canción en ingles ” You are my sunshine”).

Instantáneamente, la bebe pareció responder al estimulo de la voz de Michael, su pulso se empezó a volver normal. “Sigue cantando, Michael” le pedía desesperadamente su mamá con lágrimas en los ojos. Y el niño seguía: “Tu no sabrás nunca, querida, cuanto te amo, por favor no te lleves mi luz del sol…” Al tiempo que Michael cantaba a su hermana, la bebe se movía y su respiración se volvía tan suave como la de un gatito cuando lo acarician.

“Sigue cantando cariño” le decía su mamá y el continuaba haciéndolo como cuando todavía su hermanita estaba en el vientre de su madre. “La otra noche, querida, cuando dormía, soñé que te abrazaba en mis brazos…” seguía cantando el niño; la hermanita de Michael empezó a relajarse y a dormir con un sueño reparador que parecía que la mejoraba por segundos. “Sigue cantando Michael”… ahora era la voz de la enfermera gruñona que con lágrimas en los ojos no dejaba de pedirle al niño que continuara. “Tu eres mi luz del sol, mi única luz del sol, por favor no te lleves mi sol…”

Al día siguiente… el mismísimo día siguiente… la niña estaba en perfectas condiciones para irse a casa.

La revista “Woman’s Day” lo llamo “El Milagro de la canción del Hermano”. Los doctores le llamaron simplemente un milagro. Karen le llamo “El Milagro del amor de Dios

La adoración que agrada a Dios


Por Rick Warren

Dios no quiere una parte de tu vida. Pide todo tu corazón, toda tu alma, toda tu mente, y todas tus fuerzas. A Dios no le interesan los compromisos a medias, la obediencia parcial y las sobras de tu tiempo y dinero. Quiere tu devoción plena, no pedacitos de tu vida.

Una mujer samaritana en cierta ocasión discutió con Jesús acerca del mejor tiempo, lugar y estilo de adoración. Jesús le contestó que esos aspectos eran irrelevantes. El lugar de adoración no es tan importante como por qué adoramos y cuánto de nuestro ser le ofrecemos a Dios cuando lo hacemos. Hay una manera de adorar, buena o mala. La Biblia dice: «Así que nosotros, que estamos recibiendo un reino inconmovible, seamos agradecidos. Inspirados por esta gratitud, adoremos a Dios como a él le agrada, con temor reverente» Hebreos 12:28

La adoración que agrada a Dios tiene cuatro características:

1.- A Dios le agrada la adoración en verdad.

La gente suele decir «Me gusta pensar en Dios como alguien que…» y plantean la idea de un Dios a quien les gustaría adorar. Pero no podemos simplemente crear nuestra propia imagen de Dios, la que nos resulta cómoda y políticamente correcta, y adorarla. Eso es idolatria.
La adoración debe basarse en la verdad de las Escrituras, no en nuestra opinión acerca de Dios. Jesús le dijo a la mujer samaritana: «Los verdaderos adoradores rendirán culto al Padre en espíritu y en verdad, porque así quiere el Padre que le adoren» Juan 4:23.
«Adorar en verdad» significa adorar a Dios como la Biblia verdaderamente lo revela.

2.- A Dios le agrada la adoración auténtica.

Cuando Jesús dijo que debemos «adorar en espíritu» no se refería al Espíritu Santo sino a nuestro espíritu. Fuimos creados a imagen de Dios y, por lo tanto, somos un espíritu que reside en un cuerpo, y él diseñó nuestro espíritu para que pudiéramos comunicarnos con él. La adoración es la respuesta de nuestro espíritu al Espíritu de Dios. La adoración que agrada a Dios es profundamente emocional y doctrinal. Con nuestro corazón y nuestra cabeza.

Cuando Jesús dijo: «Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma» quería decir que la adoración debe ser auténtica y sentida, de corazón. No se trata sólo de decir las palabras correctas; debes creer en lo que dices. ¡La alabanza que no brota del corazón no es alabanza! No sirve de nada, es un insulto a Dios. Cuando adoramos, él mira más allá de nuestras palabras, observando la actitud de nuestro corazón. La Escritura afirma: «La gente se fija en las apariencias, pero yo, (el Señor) me fijo en el corazón» 1 Samuel 16:7b.

Muchas personas confunden las emociones conmovedoras producidas por la música con las estimuladas por el Espíritu, pero no son iguales. La verdadera adoración ocurre cuando nuestro espíritu responde a Dios, no a una melodía. En realidad, algunas canciones sentimentales e introspectivas entorpecen la adoración porque de concentrarnos en Dios, pasamos a enfocarnos en nuestros sentimientos. Cuando adoramos, el factor de mayor distracción somos nosotros mismos: nuestros intereses y preocupaciones acerca de la impresión que damos.

Los cristianos no se ponen de acuerdo con respecto a la manera más adecuada o auténtica de alabar a Dios, pero estos argumentos lo que más reflejan son las distintas personalidades y trasfondos. La Biblia menciona diversas formas de alabanza: La confesión, el canto, los clamores, el estar de pie, el arrodillarse, el baile, el hacer ruidos de gozo, el testimonio, la utilización de instrumentos musicales y el alzar las manos. El mejor estilo de adoración es el que más auténticamente representa nuestro amor a Dios, basado en el trasfondo y la personalidad que Dios nos dio.

Mi amigo Gary Thomas se dio cuenta de que muchos cristianos en lugar de tener una amistad vibrante con Dios, parecen estancarse en la costumbre -la adoración se convierte en una rutina satisfactoria- porque se obligan a usar métodos devocionales o estilos de adoración que no se adaptan a la unicidad con que Dios los creó. Gary se preguntó: «Si Dios con toda intención nos creó a todos distintos, ¿por qué deberíamos amarlo de la misma manera?».

Una cosa es cierta: No darás gloria a Dios intentando ser alguien que él nunca se propuso que fueses. Dios quiere que seas tú mismo. El Padre está «buscando personas que, cuando le adoren, sean sencillas y sinceramente ellas mismas cuando se presenten a él». Juan 4:23.

3.- A Dios le agrada la adoración reflexiva.

El mandamiento de Jesús de «amar a Dios con toda tu mente» se repite cuatro veces en el Nuevo Testamento. A Dios no le agrada que cantemos himnos, oremos con apatía y exclamemos con indiferencia ¡Gloria a Dios!, sin pensar en lo que hacemos, porque no se nos ocurre otra cosa que decir en ese momento. Si no pensamos en lo que hacemos cuando adoramos, la adoración no sirve. Tu mente debe estar puesta en lo que haces. Además, sé específico. Si alguien se te acerca y repite: «¡Te alabo!» diez veces, es probable que pienses «¿Por qué?». Tu preferirías dos cumplidos específicos a veinte generalidades vagas. Dios también.

4.- A Dios le agrada la adoración práctica.

La palabra de Dios afirma: «Les ruego que cada uno de ustedes, en adoración espiritual, ofrezca su cuerpo como sacrificio vivo, santo y agradable a Dios» Romanos 12:1. ¿Por qué quiere Dios tu cuerpo? ¿Por qué no dice «ofrezcan su espíritu?». Porque sin el cuerpo no podemos hacer nada en este planeta. En la eternidad recibiremos un cuerpo nuevo, mejorado, actualizado, pero mientras estemos en la tierra, Dios dice: «¡Dame todo lo que tengas!». Él solamente está siendo práctico en cuanto a la adoración. La verdadera adoración se arraiga en la Palabra.

jueves, 30 de octubre de 2008

Un corazón confiado

Por Benny Hinn

El profeta Isaías, en el Capitulo 43:2, declara, "Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; Y si por los ríos, no te anegaran. Cuando pases por el fuego, no te quemaras, ni la llama arderá en ti"

El nunca dijo, tal vez. Nosotros seguramente enfrentaremos pruebas y aflicciones. Pero la Biblia también declara que "Ninguna arma forjada contra ti prosperará..." (Isaías 54:17) Dios nunca prometió que las armas nunca se forjarían en contra de nosotros; pero ninguno de sus cabellos será tocado pues usted se encuentra en la palma de Su mano.
David dijo: "Jehová es mi luz y mi salvación; ¿De quien temeré? Jehová es la fortaleza de mi vida; ¿De quien he de atemorizarme?" (Salmo 27:1) Cuando enfrentamos problemas y aflicciones, si nuestro corazón esta establecido no será movido.

El Salmo 112:1, 6-8 nos dice: "Bienaventurado el hombre que teme a Jehová, Y en sus mandamientos se deleita en gran manera... Por lo cual no resbalara jamás; en memoria eterna será el justo. No tendrá temor de malas noticias; Su corazón está firme, confiado en Jehová." Esta es una persona que conoce la Palabra de Dios, que camina con el Señor.
Gracias a esta relación, esta persona no teme ni se mueve de acuerdo a las circunstancias de la vida. Estas personas que se mantienen firmes, son aquellas personas que mantienen un corazón confiado, son las mismas que son fuertes en su caminar con Dios.

Esto no significa que sean personas perfectas; pero sus corazones son puros, y ¡es el corazón el que tiene una gran importancia! La Palabra de Dios dice en Lucas 6:47-48: "Todo aquel que viene a mí, y oye mis palabras y las hace, os indicare a quien es semejante. Semejante es al hombre que al edificar una casa, cavó y ahondó y puso el fundamento sobre la roca; y cuando vino una inundación, el río dio con ímpetu contra aquella casa. Pero no la pudo mover, porque estaba fundada sobre la roca"

Construir sobre una roca es trabajo arduo, y así mismo lo es una vida Cristiana. No le va a ser fácil el establecer un corazón confiado. Requiere de mucho trabajo. Requiere de oración, de la lectura de la Palabra, el de abandonar una vida carnal, el de fijar sus ojos en Jesús, y mucho mas. Cuando usted sea perseguido, lo mejor que usted puede hacer es resguardarse en la Palabra de Dios, camine cerca del Señor. No escape por medio de la televisión o saliendo con sus amigos. Él es quien le dará la paz en medio de la tormenta. Él estabilizará su corazón y le dará la victoria. Siete revelaciones las cuales llenarán su corazón de confianza el día de hoy:

1. Siéntase confiado en que usted ha recibido redención. "Y no por sangre de machos cabrios ni de becerros, sino por su propia sangre, entro una vez para siempre en el lugar Santísimo, habiendo obtenido eterna redención". (Hebreos 9:12) Cuando usted dice que ha recibido redención, usted está declarando que no pertenece al reino de Satanás. La palabra de Dios en Galatas 3:13 dice lo siguiente: "Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición (pues está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero), para que en Cristo Jesús la bendición de Abraham alcanzase a los gentiles, a fin de que por la fe recibiésemos la promesa del Espíritu" El Espíritu es nuestro. La unción es nuestra. La presencia de Dios es nuestra. La presencia de Dios no le pertenece a los no redimidos, a los no-regenerados. Le pertenece solamente a los redimidos.

2. Siéntase confiado en que usted es una nueva creación. 2 Corintios 5:17 declara: "De modo que si alguno esta en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas" En Griego, la traducción correcta de "nueva criatura" es "nueva especie", algo que nunca antes ha sido creado. ¡Sus pecados han sido perdonados y olvidados! No "pesque" nuevamente los pecados que pertenecen al pasado. La Palabra nos dice que nosotros estamos siendo renovados constantemente, día a día, de gloria a gloria. Nuestra alma es sagrada. Usted puede que este luchando diariamente contra lo carnal, pero usted es creación nueva. Cuando Dios dice que hemos sido perdonados, es por que hemos sido perdonados. Establezca su corazón en esta verdad poderosa.

3. Siéntase confiado en que es usted justo en Él. 2 Corintios 5:21 dice, "Al que no conoció pecado, por nosotros, lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él" Usted no es justo porque sea usted una buena persona o porque usted sea una persona muy espiritual. ¡Usted es justo porque Él lo dijo! Romanos 3:22 dice: "La justicia de Dios por medio de la fe en Jesucristo, para todos os que creen en Él. Porque no hay diferencia". La justicia es nuestra por medio de la fe. Dios sabe que usted es un pecador, pero cuando usted es bañado por la sangre divina de su precioso hijo Jesucristo, usted es declarado justo.
4. Siéntase confiado en que Él nunca lo abandonará ni lo defraudará. Isaías 41:10 dice, "No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentare con la diestra de mi justicia"

5. Siéntase confiado en que sus promesas son Sí y Amen. Esto significa que Dios no miente, que lo que promete, ¡Él cumple! Números 23:19 declara: "Dios no es hombre para que mienta, ni hijo de hombre para que se arrepienta. Él dijo, ¿y no hará? Habló, ¿y no ejecutará?" Lo que dijo Dios está establecido para siempre. Sin embargo, ciertas personas oran sin saber que es lo que Dios promete, y es por esto que sus oraciones no son contestadas. No ore sin saber cual es la voluntad de Dios para su situación. El Señor nos prometió que nunca nos abandonaría ni nos dejaría, entonces ore con esta misma confianza. Él dijo: "Yo soy el Señor, tu Sanidad". Usted ore en confianza. El dijo: "Hay libertad para ti" Por lo tanto, comience a pedir de acuerdo con su voluntad. Deje de decir: "si es que es Tu voluntad..."

6. Siéntase confiado en que la fe puede vencer al mundo. 1 Juan 5:4 dice, "Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; y esta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra fe" El Señor también dijo: nada os será imposible, si tuviereis fe (Mateo 17:20) Siéntase confiado y establecido en que su fe puede vencer al mundo. Si usted desea fe viviente, sea como Job quien dijo: "Del mandamiento de sus labios nunca me separé; Guarde las palabras de su boca mas que mi comida" (Job 23:12) Esto significa: "Tengo mas hambre de Tu Palabra, mas que de la comida" Cuando usted se encuentre en esta situación, la fe será vida en usted.
7. Siéntase confiado en que todo el poder en el Nombre de Jesús es suyo. No hay nada que usted pida en el nombre de Jesús, en fe, que no le sea concedido. El Señor dijo en Mateo 28:18: "Toda potestad me es dada en el cielo como en la tierra". Y en Juan 16:23, el Señor también nos dice, "De cierto, de cierto os digo, que todo cuanto pidiereis al Padre en mi nombre, os lo dará".
Siéntase confiado en que todo el poder en el nombre de Jesús es suyo. Usted puede pedir en este nombre y recibir

Di no al halloween

Orar en todo tiempo.


Unos años atrás, un anuncio de televisión enfocaba el rostro sonriente de una preciosa joven. Aparecía mirando hacia abajo y evidentemente ocupada con cierta tarea, aunque no se veía lo que hacía. Mientras desempeñaba su labor, ella oraba. El anuncio hacia énfasis en ocupar tiempo para orar, aunque tuvieran que desarrollarse otros deberes durante el día.

Cuando el movimiento de la cámara mostró un panorama más amplio, se vio claramente que la joven cambiaba el pañal a su bebé.

¡Qué hermosa ilustración acerca de lo fácil que es para nosotros hablar con el Señor! Tal vez le sea difícil apartar un tiempo, aun breve, cada mañana, pero en el transcurso de las veinticuatro horas del día, podemos con creatividad encontrar unos instantes y dedicarlos a Dios.

Murmuramos y rechinamos,
Nos enfurecemos y estallamos,
Hablamos entre dientes y rezongamos,
Nuestros sentimientos resultan dañados.
No podemos entender
Nuestra visión se nubla más y más,
Y todo lo que necesitamos es:
Tener un momento con Él.

La mayoría de nosotros estamos tan ocupados durante el día que se nos hace muy difícil apartar una porción de tiempo para orar, y no precisamente para una breve plegaria de gratitud, sino unos momentos de genuina comunicación con el Señor.

Dios anhela que tengamos este tiempo juntos, y nosotros lo necesitamos. Hay ocasiones para estar a solas con el Salvador, pero es necesario que con gran empeño las busquemos.

Tomado del libro: Amanecer con Dios

¿Cuáles son tus prioridades?

El conocimiento tiene el propósito de hacernos sabios. ¿Qué es, realmente, la sabiduría?A menudo pensamos que la educación es necesaria para tener éxito en el mundo actual. Sin embargo, cuando pensamos así, generalmente nos dejamos absorber tanto por el esfuerzo para alcanzar éxito temporal que perdemos de vista el propósito y la importancia de la verdadera educación. Entonces, la educación llega a ser una frenética búsqueda de éxitos académicos, con el objetivo final de lograr seguridad financiera.

Salomón enfatiza en el libro de Proverbios que la sabiduría debe dirigir todos los aspectos de nuestra vida. La sabiduría une la santidad con los deberes comunes de la vida. Sabiduría es pensar y actuar como Dios pensaría y actuaría en cualquier situación.

El libro de Proverbios afirma que no existe verdadera sabiduría fuera del “temor de Jehová” (Proverbios 1:7; 9:10). El temor aquí no se refiere a tener miedo. Tememos a Dios cuando lo reverenciamos y lo respetamos (ver Éxodo 20:20). La capacidad para actuar sabiamente en cada situación surge de un corazón unido con Dios, con lo cual el creyente humilde comparte el carácter santo de Dios.

En nuestra época, muchas personas consideran el conocimiento científico como de mayor valor que el conocimiento filosófico o el religioso. Sin embargo, la clase de conocimiento que Dios nos invita a recibir es la experiencia de la santidad. Conocer por experiencia la gracia salvadora de Cristo abre ante nosotros las puertas de la eterna ciudad de Dios.

Desde una perspectiva humana, la sabiduría es participar en lo bueno y lo malo. La sabiduría humana procura llegar a ser sabia en todas las cosas, y no se establece sobre nada que sea una verdad absoluta.
La sabiduría de Dios, por otro lado, es conocer la diferencia entre el bien y el mal, y escoger sólo el bien. El poder de elegir lo bueno y practicarlo es posible mediante la vida, la muerte y la resurrección de nuestro Señor.

“El conocimiento de Dios es el fundamento de toda verdadera educación y de todo servicio verdadero… Este conocimiento es la preparación esencial para esta vida y para la venidera” (El ministerio de curación pág. 318, EGW).

Fuente: Guía de Estudio de la Biblia del 2000 (ACES)

martes, 28 de octubre de 2008

Dios lo hará otra vez - Ruth Mixter

Salmos 146 (Nueva Versión Internacional)

1 ¡Aleluya! ¡Alabado sea el Señor!
Alaba, alma mía, al Señor.
2 Alabaré al Señor toda mi vida;
mientras haya aliento en mí, cantaré salmos a mi Dios.

3 No pongan su confianza en gente poderosa,
en simples mortales, que no pueden salvar.
4 Exhalan el espíritu y vuelven al polvo,
y ese mismo día se desbaratan sus planes.

5 Dichoso aquel cuya ayuda es el Dios de Jacob,
cuya esperanza está en el Señor su Dios,
6 creador del cielo y de la tierra,
del mar y de todo cuanto hay en ellos,
y que siempre mantiene la verdad.
7 El Señor hace justicia a los oprimidos,
da de comer a los hambrientos
y pone en libertad a los cautivos.
8 El Señor da vista a los ciegos,
el Señor sostiene a los agobiados,
el Señor ama a los justos.
9 El Señor protege al extranjero
y sostiene al huérfano y a la viuda,
pero frustra los planes de los impíos.

10 ¡Oh Sión, que el Señor reine para siempre!
¡Que tu Dios reine por todas las generaciones!
*¡Aleluya! ¡Alabado sea el Señor!

¿Qué parte es buena para comenzar a leer la Biblia?

Para los principiantes, es importante tomar en consideración que la Biblia no es un libro ordinario que se lee tranquilamente de pasta a pasta. En realidad es una biblioteca, o colección de libros escritos por diferentes autores en muchos lugares, dentro de un período de dos mil años. Martín Lutero dijo que la Biblia es la “cuna de Cristo” porque finalmente toda la historia y la profecía bíblica apuntan a Jesucristo.

Por lo tanto, cualquier nuevo lector de la Biblia debería comenzar con los Evangelios. El libro de Marcos es conciso y corto, siendo un buen lugar para comenzar. Luego tal vez quieras proseguir con el Evangelio de Juan, el cual se enfoca en las cosas que Jesús declaró acerca de Él Mismo. Marcos nos cuenta acerca de lo que Jesús hizo, mientras que Juan nos dice lo que Jesús dijo. En Juan se encuentran algunos de los pasajes más claros y sencillos, tales como Juan 3:16, pero también algunos de los más profundos y difíciles. El leer los Evangelios (Mateo, Marcos, Lucas y Juan), te familiarizará con la vida y el ministerio de Cristo.

Después de eso, lee a través de algunas de las Epístolas (Romanos, Efesios, Filipenses). En ellas se nos enseña cómo vivir nuestras vidas de manera que honren a Dios. Cuando comiences a leer el Antiguo Testamento, lee el libro del Génesis. Nos relata la manera en que Dios creó al mundo, y nos dice acerca de la caída de la raza humana en el pecado, así como el impacto que esto tuvo en el mundo. Éxodo, Levítico, Números y Deuteronomio, pueden resultar difíciles de leer, porque tratan de todas las leyes por las que Dios requería que viviera el pueblo judío. Aunque no debes evitar estos libros, tal vez sea mejor dejarlos para un estudio posterior. En cualquier caso, trata de no sumergirte mucho en ellos. Lee desde Josué hasta Crónicas para tener un buen conocimiento de la historia de Israel. El leer desde Salmos hasta los Cantares de Salomón, te dará una buena idea de la poesía y sabiduría hebreas. Los libros proféticos, desde Isaías hasta Malaquías, pueden resultar difíciles de entender. Recuerda, la clave para entender la Biblia es pedirle a Dios sabiduría (Santiago 1:5). Dios es el autor de la Biblia, y Él quiere que comprendas Su Palabra.

No obstante, primeramente es importante saber que no todos pueden ser estudiantes de la Biblia, sino solo aquellos con las “calificaciones” necesarias para estudiar la Palabra con las bendiciones de Dios:

¿Eres salvo(a) por la fe en Jesucristo (1 Corintios 2:14-16)?

¿Estás hambriento(a) por la Palabra de Dios (1 Pedro 2:2)?

¿Estás escudriñando diligentemente la Palabra de Dios (Hechos 17:11)?

Si has respondido “si” a estas tres preguntas, puedes estar seguro(a) que Dios bendecirá tus esfuerzos por conocerlo a Él y a Su Palabra, sin importar dónde comiences y sin importar tu método de estudio. Si no estas seguro(a) de ser cristiano(a) – que has sido salvado(a) por la fe en Jesucristo y que tienes al Espíritu Santo dentro de ti – descubrirás que es imposible entender el significado de las palabras de la Escritura. Las verdades de la Biblia están escondidas de aquellos que no han depositado su fe en Cristo, pero ellas son la vida misma para aquellos que creen (1 Corintios 2:13-14; Juan 6:63).

lunes, 27 de octubre de 2008

Las discusiones de los padres y su efecto en los hijos


Cuando una madre y un padre muestran hostilidad y desprecio el uno hacia el otro, sus hijos sufren.
Efesios 4:26-27, 29-32; 5:2,4, 19-20. La Palabra es eficaz y clara en todo tiempo y lugar.
Si leyéramos los textos de nuestro tema lo podemos relacionar con cualquier situación beligerante de las relaciones humanas.

En nuestro pasaje existen palabras fuertes y sobre todo tristes en la experiencia de las malas relaciones interpersonales familiares: “Airaos, no pequéis, enojo, dar lugar al diablo, palabra corrompida, amargura, ira, gritería, calumnias (maledicencia), malicia, palabras deshonestas, necedades y groserías (truhanerías). Desgraciadamente este es un tremendo “equipo con suplentes”, de ambas partes, en las contiendas de muchos hogares hoy.

La angustia infantil
Los niños, aquellos cuya niñez no les ha sido arrebatada por alguna catástrofe natural, conflicto bélico en su país, por la orfandad, la explotación u otras tragedias, quizás no vivan una vida de angustia y desesperación, pero tienen sus dramas.

Debemos considerar estos dramas como esperables en la infancia. Aunque no lo recordemos, todos cuando niños alguna vez nos hemos sentido incomprendidos, inútiles, malqueridos, con temor a ser abandonados, terriblemente culpables o malos.

Hasta hace poco tiempo esa angustia existencial se vivía en silencio. Hoy en día, los niños expresan con más naturalidad sus dificultades y sus miedos. Son muchos los niños afectados por esta situación. Esta situación ha dejado de ser excepcional para pasar a ser bastante habitual.

Si pedimos a un adulto -cuyos padres no tuvieron un matrimonio feliz- que describa los recuerdos de su niñez, es probable que escuchemos historias de tristeza, confusión, falsas esperanzas y amargura. Sus padres pueden haber divorciado, o haber sido esas parejas que sólo seguían juntos “por el bien de los niños”.

No importa, para el tema que estamos tratando, si una pareja está casada, separada o divorciada; cuando una madre y un padre muestran hostilidad y desprecio el uno hacia el otro, sus hijos sufren. Esto ocurre porque el desarrollo de un matrimonio -o un divorcio- crea una especie de “crisis afectiva-emocional” en los niños.

Así como un árbol (Sal. 128:3b, 144:12ª) se ve afectado por la calidad del aire, el agua y el suelo en su medio, la salud emocional de los niños está determinada por la calidad de las relaciones íntimas que los rodean.

Sus interacciones como padres, influyen en las actitudes y logros de sus hijos, la capacidad para regular sus emociones para llevarse bien con los demás. En general, cuando los padres se preocupan y se apoyan mutuamente, la felicidad emocional aflora en los hijos. Pero los niños que están constantemente expuestos a la hostilidad que existe entre sus padres, pueden toparse con riesgos que ni siquiera son capaces de advertir.

Síntomas preocupantes
No hay ninguna duda de que los niños se sienten afligidos cuando son testigos de las peleas de los padres. Sus reacciones varían entre: el llanto, quedarse inmóviles, tensionados, taparse los oídos, esconderse (o por lo menos taparse los ojos, creyendo que así dejará de existir tan terrible escena).

Incluso los niños más pequeños, reaccionan ante las discusiones de los adultos con cambios fisiológicos tales como el aumento del ritmo cardíaco y la presión sanguínea. El estrés de vivir con el conflicto de los padres puede afectar el desarrollo del sistema nervioso autónomo de un pequeño, el cual determina la capacidad del niño para resolver problemas y por consiguiente aparecen los síntomas en su proceso de aprendizaje, por más inteligente y madura que sea la criatura..

Los hijos de las parejas muy conflictivas obtienen clasificaciones más bajas. La gran tragedia educativa de nuestro tiempo es que muchos niños están fracasando en la escuela, no por problemas intelectuales o físicos, sino por sus “desequilibrios” emocionales, producto del ejemplo emocional que reciben en el seno de sus hogares.

Los niños educados por padres cuyos matrimonios se caracterizan por la crítica, la posición defensiva y el desprecio, tienen muchas más probabilidades de mostrar una conducta antisocial y agresiva hacia sus compañeros de juego. Tienen mayores dificultades para regular sus emociones, concentrar su atención y calmarse a sí mismos cuando se sienten perturbados. También, el “maltrato emocional ” recibido por un niño puede manifestarse en problemas de salud, que pueden ir desde tos y resfríos hasta llegar a cuadros de estrés crónico.

• Las formas adecuadas de abordar los conflictos entre padres, pueden ser aprendidas por ellos cuando las maneras son las apropiadas y dentro de un marco espiritual las cuales servirán como un amortiguador adecuado contra los efectos perniciosos de los conflictos matrimoniales y familiares en general.

• Los padres cuyos matrimonios son insatisfactorios, ofrecen un mal ejemplo a sus hijos sobre la forma de relacionarse con los demás. Los niños que son testigos de la agresividad, beligerancia o desprecio de sus padres entre sí, tienen más probabilidades de mostrar esta misma conducta en sus relaciones con sus amigos.

• Al carecer de modelos que les enseñen cómo escuchar con empatía (ponerse en lugar del otro) y resolver los problemas en forma cooperativa, los niños siguen el libreto que sus padres les han enseñado, un libreto que afirma que la hostilidad y la actitud defensiva son respuestas adecuadas para el conflicto y que la gente agresiva consigue lo que quiere.

Posibles reacciones del niño
Las consecuencias que sufre el hijo de padres conflictivos estarán más relacionadas: con las desavenencias familiares previas y asociadas a la separación y con el papel que hacen jugar al niño en la separación más que con la propia separación.
Esto, junto con la edad y la madurez del propio niño condicionarán la forma cómo esta separación influirá en su desarrollo.

Reacción de ansiedad, e incluso angustia, durante el conflicto. Suelen sentir miedo. Lloran a menudo y esto les tranquiliza. No cargar las tintas amenazándolos o castigándolos por ello.

Insisten una y otra vez en el deseo de que los padres vuelvan a estar juntos. Hasta que no aceptan que esto no es posible, se muestran muy tristes e infelices. Acabarán aceptando que esto no es más que una fantasía.

Como influye la edad y madurez del niño
En la primera infancia (hasta 7 años), dispone de menos mecanismos para elaborar lo que está pasando. En consecuencia, suelen aparecer manifestaciones de ello a través del cuerpo: molestias abdominales, vómitos, dolores de cabeza. Probablemente también aparezcan trastornos en el sueño y en la alimentación
Entre la segunda infancia y la preadolescencia (de 8 a 12) puede sentirse la causa de dicha separación y, por tanto, sentir gran culpabilidad. Suelen aparecer depresiones con fases más agresivas, repercusiones en el rendimiento escolar, regresiones a edades anteriores (vuelven a surgir comportamientos de etapas superadas).
En hijos ya más mayores (de 12 en adelante) suele desarrollarse una hipermadurez en parte positiva, pero a la vez peligrosa que pretende negar la autoridad de sus padres.
Los puntos más conflictivos y de constante discusión de los padres suelen ser: los hijos, el dinero y las nuevas relaciones. Intente ser objetivo y no intentar poner al hijo de su parte. Hay que intentar solucionar estas cuestiones, sin involucrar a los hijos.

Sin embargo hay esperanza…
Aunque esto puede resultar perturbador para los padres que están experimentando un conflicto matrimonial, hay esperanzas. En especial para las parejas de padres que se sientan motivadas por cuidar y dar un buen ejemplo a sus hijos.
Las primeras y más importantes lecciones que una pareja de padres debe aprender son que:

• No es el conflicto entre los padres, que ya es perturbador en sí mismo, lo que resulta tan perjudicial para los niños, sino la forma en que los padres manejan sus disputas, o sea la intensa hostilidad y la mala comunicación que puede desarrollarse entre ellos.

• Por último y lo más importante, se tiene que tener la voluntad de obedecer a Dios. El pasaje que nos acompaña tiene también palabras reparadoras y sanadoras de toda herida emocional: “no pecar, no dar lugar al diablo, tener palabras buenas y edificadoras que sean de bendición, ser bondadosos, compasivos, perdonadores, andar en amor, tener acciones de gracia, alabando al Señor en nuestros corazones y dándole gracias por todo”. Este es otro equipo. ¿Cuál integramos? Depende exclusivamente de nosotros decidirlo.

Autor: Prof. Dr. Osvaldo Juan Maccio.

Cierra las puertas si quieres hablar con Dios



Por Danilo Montero

Una clave para la intimidad con Dios. Es buscarlo en lo secreto. La oración personal cuando se da a solas es la antesala para conocer al Padre Celestial que se revela a quienes lo buscan en ese contexto.

Durante mi viaje a Costa Rica me llevé un pequeño libro que encontré en mi bodega mientras buscaba otra cosa.
Su autor, Bob Sorge, atrapó mi atención hace más de 6 años por primera vez. Lo escuché compartir sobre el tema de la lealtad y las decisiones que tomé en aquel momento le dieron un giro muy importante a mi vida.

El libro se llama: Secretos del lugar secreto. El señor Sorge ha pasado los últimos años de su vida dedicado a la oración y contemplación, parte movido por una tragedia personal que lo dejó practicamente sin voz y parte, movido por una sed espiritual que se acrecenta cada día. Aparte, Bob ha estado apartado los últimos dos años en un sabático que le alejó de las pocas conferencias en que enseñaba. Su quebrantada voz le permite hablar por un máximo de 40 minutos y con mucho dolor.

Dicho todo esto, me parece que lo que tenga que decir ha de ser digno de ser escuchado.
Su reflexión sobre Mateo 6:6 no presenta nada nuevo. Eso es lo mas interesante.

Te explico...

La pregunta que Bob Sorge hace al inicio del capítulo 2 me es demasiado común y sospecho que para ti también lo es: Luchas frecuentemente con el sentimiento de sentirte desconectado de Dios?

Se podría escuchar un coro de gente gritando: SIIIIIII! Es en este momento que la gente tomaría un lápiz y aguantaría la respiración con tal de no perder de un solo sonido que venga de la boca del especialista que imparte un seminario. El secreto está a punto de ser vocalizado. Solo que el secreto no es tan secreto. Jesús lo ha gritado desde hace mucho. Hablo de una práctica piadosa que nos ayuda a lidiar con esa terrible sensación de lejania y desconexión con que los mortales luchamos cuando se trata de orar.

Vamos al grano.
"pero tú, cuando ores, ve a tu cuarto y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en lo secreto y tu Padre que ve en lo secreto..."

"El lugar secreto es el portal al trono" eso dice Bob. Y es que si creemos lo que Jesús dijo tendremos que considerar que tenemos aquí una clave para la intimidad con Dios. Es buscarlo en lo secreto. La oración personal cuando se da a solas es la antesala para conocer al Padre Celestial que se revela a quienes lo buscan en ese contexto.

He acostumbrado orar en todo lugar desde hace años. El minsterio itinerante me obliga a eso. Horarios distintos para dormir y comer. Nada es rutinario, gente distinta, atrasos en los vuelos o entrevistas no planificadas. Así es mi vida. Hace rato no puedo escoger mi hora favorita del día (la caída del sol) en mi rincón favorito ( eso es para mí) para orar.

Me gusta hablar con Dios en donde sea que esté. Sin embargo,debo admitir que algo me ha faltado y creo haberlo encontrado en las palabras de Jesús. He decidido volver a pasar ratos completamente a solas con Dios en la esperanza de que esa sensación deliciosa de intimidad con Dios me vuelva a ser familiar o cotidiana.

Te recomiendo considerar el consejo, quizás te cambie la vida.

sábado, 25 de octubre de 2008

viernes, 24 de octubre de 2008

Hoy… Bendeciré al Dios de toda Consolación

“ Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de misericordias y Dios de toda consolación”. II Cor 1:3

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  • Hoy es un día de misericordias y un día de consolación. No solo porque puedo vivir este día disfrutando de la misericordia y de la consolación de Dios, si no además porque puedo ser un canal para que la misericordia y la consolación toquen y llenen el corazón y la vida de alguien que pueda estar cerca de mí. Hoy, podré disfrutar de esa misericordia y de esa consolación porque tales bendiciones llegan desde la fuente de toda alegría y esa fuente no es una cosa, más es una persona.
  • La persona de Dios.
  • Porque este es un día de misericordia y de bendición es que puedo bendecir con toda mi alma al Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, quien a la vez es también mi Dios y mi Padre. Por eso podré decir hoy como el salmista: “Yo he confiado en tu misericordia; mi corazón se regocijará en tu salvación” Sal 13:5. “Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida y habitaré en la casa de mi Padre por siempre” Sal 23:6. Si no podemos disfrutar de la misericordia y de la consolación, realmente es muy difícil poder vivir porque nuestros corazones están hambrientos de estas dos cosas.
  • Hoy, por lo tanto levantaré y bendeciré con mi voz al Señor porque es mi Dios y Padre de toda misericordia y de toda consolación.
  • Hoy es día de consolación porque en medio de las turbaciones y los conflictos que querrán despojarme de la paz que tanto anhelo, Dios no solo me muestra su misericordia, sino también su consolación. El Apóstol Pablo escribió: “Porque las cosas que se escribieron antes, para nuestra enseñanza se escribieron, afín de que por la paciencia y la consolación de las Escrituras, tengamos esperanza, pero el Dios de la paciencia y de la Consolación os dé entre vosotros un mismo sentir según Cristo Jesús” Rom 15:4,5.
  • Señor, es en medio de la multitud de tus tiernas misericordias que tengo el privilegio de llegar ante tu trono y con alegría profunda cantar junto con el salmista: Tu misericordia es mejor que la vida. Tus beneficios, misericordias y consolaciones sobre mi son más numerosos que las hojas de los árboles del bosque. Tu diaria bondad viene a ser para mi como el aire fresco de cada amanecer. Tu gracia me sustenta hora a hora desde la salida del sol hasta el anochecer y aún mientras duermo ella destila sobre mi espíritu como el dulce rocío que cae de tu mano. Hoy aprendo que disfrutando de tus misericordias y tu consolación las cargas vienen a ser una bendición y las dificultades como alas. Gracias Señor. Amen.
  • Dr. Serafín Contreras Galeano

jueves, 23 de octubre de 2008

El Nombre de Jesús



El nombre de Jesús
Ha roto mis cadenas
Por su muerte en la cruz
Ha hecho cosas nuevas.

El nombre de Jesús
Renueva con poder
Cubriéndoles de luz
si se atreven a creer.

Patricia J. Olivera Costilla.

¿Qué significa tener temor de Dios?

Para un no creyente, el temor de Dios es temer el juicio de Dios y la muerte eterna, la cual es la separación eterna de Dios (Lucas 12:5; Hebreos 10:31). Para un creyente, el temor de Dios es algo muy diferente. El temor del creyente es el reverenciar a Dios. Hebreos 12:28-29 es una buena descripción de esto, “Así que, recibiendo nosotros un reino inconmovible, tengamos gratitud, y mediante ella sirvamos a Dios agradándole con temor y reverencia; porque nuestro Dios es fuego consumidor.” Esta reverencia y admiración es exactamente lo que significa el temor de Dios para los cristianos. Este es el factor que nos motiva a rendirnos al Creador del Universo.

Proverbios 1:7 declara, “El principio de la sabiduría es el temor de Jehová...” Hasta que comprendamos quien es Dios, y desarrollemos un temor reverencial hacia Él, no podremos adquirir la verdadera sabiduría. La verdadera sabiduría solo procede del entendimiento de quién es Dios – que Él es santo, justo y soberano. Deuteronomio 10:12, 20.21 dice, “Ahora, pues, Israel, ¿qué pide Jehová tu Dios de ti, sino que temas a Jehová tu Dios, que andes en todos sus caminos, y que lo ames, y sirvas a Jehová tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma.” – “A Jehová tu Dios temerás, a Él solo servirás, a Él seguirás, y por su nombre jurarás. Él es del objeto de tu alabanza, y Él es tu Dios, que ha hecho contigo estas cosas grandes y terribles que tus ojos han visto.” El temor de Dios es la base para nuestro andar en Sus caminos; servirle y si, amarlo.

Muchos tienen la tendencia de minimizar el temor de Dios de los creyentes interpretándolo como “respetarlo”. Mientras que el respeto indiscutiblemente está incluido en el concepto del temor de Dios, es mucho más que eso. El temor bíblico de Dios para un creyente, incluye el entender lo mucho que Dios aborrece el pecado y temer Su juicio sobre éste – aún en la vida de un creyente. Hebreos 12:5-11 describe la disciplina de Dios hacia el creyente. Aunque que es hecha en amor (Hebreos 12:6), aún así es algo para temerse. Como hijos, el temor a la disciplina de nuestros padres se espera que prevenga las malas acciones. Lo mismo debe ser verdad en nuestra relación con Dios. Debemos temer Su disciplina y por lo tanto, buscar el vivir nuestras vidas de tal manera que lo agrademos.

Los creyentes no deben “tener miedo” de Dios. No tenemos razón para tenerle miedo. Tenemos Su promesa de que nada podrá separarnos de Su amor (Romanos 8:38-39). Tenemos Su promesa de que nunca nos dejará o desamparará (Hebreos 13:5). El temer a Dios significa tener tal reverencia por ÉL, que éste tenga un gran impacto en la manera en que vivimos nuestras vidas. El temor de Dios es reverenciarlo, someternos a Su disciplina, y adorarlo con admiración.

miércoles, 22 de octubre de 2008

Alaba - Ricardo Rodriguez & Danny Berrios

Sabemos perdonar?


Por: Joyce Meyer

Por qué a mi Dios? Ese fue el llanto de mi corazón que por muchos años llenó mis pensamientos y afectó mi actitud diariamente. Había sido sexual, física, verbal y emocionalmente abusada desde temprana edad hasta que me fui de la casa a los 18 años de edad. De pequeña experimenté mucho rechazo, abandono y traición.

Debido a las heridas emocionales que acarreaba tras años de sufrimiento, sentía lástima por mi misma. Ese fue un enorme problema que me mantuvo apartada de cumplir el plan de Dios para mi vida Muchas personas están terriblemente heridas y andan desesperadas clamando por alguien que las ayude, mas no están dispuestas a recibir la ayuda que Dios les ofrece. Es increíble cómo queremos que las cosas se den sólo a nuestra manera. No importa cuanto necesitemos su ayuda, nunca la vamos a recibir hasta que estemos dispuestos a obrar a la manera de Dios.

Cuando alguien nos hiere, muchas veces reaccionamos como si esa persona nos hubiese robado. Sentimos que nos debe algo, aunque Jesús quiere que lo dejemos ir. Él dijo: "Y cuando estéis orando, perdonad, si tenéis algo contra alguno, para que también vuestro Padre que está en loa cielos os perdone a vosotros vuestras ofensas".
Si nos rehusamos a perdonar, ¿qué esperanza nos queda de (que vamos a recibir lo que necesitamos? Para recibir de Dios lo que Él ha prometido en su Palabra, tenemos que obedecerlo, independientemente de cuan difícil pueda ser. Tenemos que convertimos en hacedores de la Palabra.

El mayor engaño que Satanás ha perpetuado en el área del perdón es la idea de que nuestros sentimientos no han cambiado, por lo que en realidad no hemos perdonado. Muchas personas se creen esta mentira. Deciden perdonar a quien los haya herido, pero el enemigo los convence de que mientras siga teniendo los mismos sentimientos, en realidad no ha perdonando a esa persona.

Uno puede tomar la decisión correcta de perdonar y no "sentir" diferencia alguna. Aquí es cuando se necesita de la fe para superar la situación. Usted ha hecho su parte, y ahora está esperando en Dios. Su parte es sanar sus emociones, hacerle "sentir" bien y realizado. Sólo Dios tiene el poder de cambiar lo que siente por la persona que le ha herido.

Otro concepto, erróneo es que todo lo que tenemos que hacer es tomar la decisión de perdonar y ahí termina nuestra parte. Jesús también dijo:"Bendecid a los que os maldicen, y orad por los que os calumnian" (Lucas 6:28). En adición a eso en Romanos 12:14 dice: "Bendecid a los que os persiguen; bendecid, y no maldigáis".

En este contexto, la palabra bendecid significa "hablar bien de". Es decir, se trata de extender misericordia a las personas que no se lo merecen.
Debemos orar por ellos para que sean bendecidos espiritualmente. Es nuestro deber pedirle a Dios que les presente la verdad y se les revele de manera que estén dispuestos a arrepentirse y a ser liberados de sus pecados.

.¿Ve lo que se pierde cuando sólo está dispuesto a perdonar y no ir más allá?
La clave para ser capaz de perdonar es recibir al Espíritu Santo. ¿Ha sido herido? ¿Abusado? ¿Rechazado? ¿Quiere ser verdaderamente sanado? En tal caso le pregunto: ¿Está dispuesto a perdonar?

Ore y exonere a la persona que lo hirió repitiendo esta oración: "Espíritu Santo, respira en mí y dame fortaleza. Perdono a (nombre) por (explique la situación), Lo (a) libero de su deuda y te pido que lo (a) bendigas en el nombre de Jesús. Señor, escojo andar por tu camino. Te amo y dejo en tus manos esta situación. Te entrego mi carga y confío que me restaurarás totalmente. Ayúdame Señor. Sáname de todas las heridas que me afligen. Hago esta oración en el nombre de Jesús, amén".

Ahora por fe deje todo en las manos de su Padre.

martes, 21 de octubre de 2008

¿Qué es el Apocalipsis?

La palabra “Apocalipsis” viene de la palabra griega “apocalupsis” que significa “revelar, develar, quitar la cubierta.” El libro de Apocalipsis a veces es llamado “El Apocalipsis de Juan”, porque es Dios quien revela el final de los tiempos al apóstol Juan. Es más, la palabra griega para Apocalipsis es la primer palabra en el texto griego del libro de Apocalipsis. La frase “literatura apocalíptica” es usado para describir el uso de símbolos, imágenes y números para representar eventos futuros. Fuera del Apocalipsis, los ejemplos que tenemos de literatura apocalíptica en la Biblia, son Daniel capítulos 7–12, Isaías capítulos 24–27, Ezequiel capítulos 37–41, y Zacarías capítulos 9–12.

¿Por qué fue la literatura apocalíptica escrita con tales imágenes y simbolismos? Los libros apocalípticos fueron escritos cuando era más prudente disfrazar el mensaje en imágenes y simbolismos, que dar un mensaje en un lenguaje claro. Más aún, el simbolismo creó un elemento de misterio acerca de los detalles del tiempo y el lugar. Sin embargo, el propósito de tales simbolismos, no era causar confusión, sino más bien instruir y animar a los seguidores de Dios en tiempos difíciles.

Más allá del significado bíblico específico, el término “apocalipsis” es frecuentemente usado para referirse al final de los tiempos en general, o a eventos específicos del final de los tiempos. Los eventos del final de los tiempos, tales como la Segunda Venida de Jesucristo y la batalla del Armagedon a veces son referidos como el apocalipsis. El apocalipsis será la última revelación de Dios, de Su ira, Su justicia, y por último Su amor. Jesucristo es el supremo “Apocalipsis” de Dios, porque Él nos revela a Dios (Juan 14:9; Hebreos 1:2).

Sabiduría Financiera


Explorando el concepto bíblico de la esclavitud económica

por Cash Luna


La mayoría de las personas pasan diariamente de ocho a doce horas trabajando para ganarse el sustento; invierten más tiempo en la oficina que en la iglesia o con la familia. Pero no saben lo que Dios dice acerca de administrar los ingresos que obtienen a través de su esfuerzo. Por ello, es necesario hablar de las finanzas a la luz de la Palabra; quizás no sea tan emotivo, pero sí muy edificante.
Mucha gente no sabe en qué orden ir haciendo los bienes en su vida. Hay jóvenes que lo primero que adquieren es un carro del año, en vez de invertir su dinero. Ignoran que a los 4 años ese carro se devaluó a la mitad del precio original, y que por él pagaron, sumando los intereses, el doble. Invierten su dinero en cosas que pierden valor y después se preguntan por qué Dios no les añade bendición.
Nosotros debemos educar a nuestra conciencia para que no nos deje cometer ese error. El Espíritu de Dios, quien nos unge con su poder, también nos da la inteligencia para administrar los bienes. La sabiduría te puede ayudar a prosperar mucho, pero la falta de ella te deja pobre. Shakespeare decía: “La gente que vive comprando bienes superfluos, llega a tener que vender los bienes necesarios”. Si sigues el camino de la sabiduría y el dominio propio, llegará el día que tendrás con qué comprarte lo que quieras; pero si te apresuras, pronto te endeudarás. A mí me gusta entrar a las tiendas y ver todas las novedades que ofrecen y que no necesito.

¿En qué debo invertir primero?

Quiero mostrarte en la Biblia el orden de cómo debes hacer tus bienes. Proverbios 24:27 dice: “Prepara tus labores fuera, y disponlas en tus campos, y después edificarás tu casa.”
Según la Escritura, primero debes invertir en tu negocio y luego en tu casa. Una persona me dijo en una ocasión: “Pregúntale a tu esposa qué quiere primero, si casa o negocio; si ella te responde como lo haría una mujer comúnmente, te dirá que una casa”. Cuando hice esta pregunta a Sonia, mi esposa, ella me respondió: “El negocio”. Y así fue como invertimos primero en nuestro negocio (el cual tuve antes de pastorear tiempo completo), ahorramos por años las ganancias de éste, y construimos después, sin deudas, nuestra casa.
La mayor parte de la gente prefiere adquirir una casa primero, porque tienen miedo de quedarse sin un lugar donde vivir, y de no tener que heredarle a sus hijos. Si tú quieres ser una persona productiva, debes perder el miedo a invertir, o bien con todo y éste, hacerlo.
La Biblia nos enseña que antes de invertir el dinero en comprar o construir una casa, debemos invertirlo en un negocio que produzca utilidades, con las cuales adquirir esa casa. Dios quiere que hagas producir los recursos que el te dio. Si Él te da cinco talentos, Él espera que produzcas otros cinco.
Muchos han deseado tener su negocio propio y nunca llegan a iniciarlo. La razón es que han invertido todo su dinero en una casa. Piensan que invertir en un negocio es un riesgo y por eso nunca se atreven a iniciar uno; pero, ¿quién les dijo que comprar una casa no es un riesgo? Si la compran en una mala ubicación, puede perder su valor inicial. Además, cuando se ven en una época de crisis, no pueden tomar esa casa y venderla en partes; no puede vender el garaje, o el cuarto de servicio, ni un solo ladrillo por aparte. Por otro lado, hay quienes compran la casa a crédito pagando altos intereses, sin darse cuenta que ahorrando ese dinero por el tiempo que pagaron la deuda, podrían haber adquirido una mejor.
Con esto no estoy diciendo que sea malo comprar o construir una casa, sólo que es mejor tener antes un negocio que produzca, y comprar después no sólo una casa, sino varias. Lo que está mal es el orden para hacer las inversiones.
Si tú eres un profesional, invierte primordialmente en el aprendizaje, porque tú te ganas la vida con lo que sabes. Incrementa y actualiza tus conocimientos y tu valor crecerá también. Si creces en sabiduría, prosperarás.
Los ejecutivos de hoy no se contratan por lo que saben solamente, sino también por la velocidad que tienen para aprender lo nuevo. Si no quieres estudiar y actualizarte, estás en camino al fracaso. Jamás debes vivir para el presente, sino pensando en el futuro.

La Palabra de Dios en Proverbios 27:23 dice: “Sé diligente en conocer el estado de tus ovejas, y mira con cuidado por tus rebaños porque las riquezas no duran para siempre; ¿Y será la corona para perpetuas generaciones?” Dios no le está hablando aquí solamente a pastores espirituales, sino que también a pastores agrícolas, a una persona que cría ovejas. Estos pastores son los empresarios de hoy y podríamos decir que las ovejas son los clientes.

lunes, 20 de octubre de 2008

Cambia tu presente y contruye tu futuro


En los últimos días me he encontrado que mucha gente esta teniendo problemas porque no han podido olvidar su pasado, siempre lo están recordando, es como si cada día sacaran el baúl de los recuerdos y buscaran el álbum de su pasado para no olvidar lo bueno o malo que fue su vida hace años o inclusive ayer. Es bien cierto que para el ser humano es muy fácil recordar el pasado que ponerse a pensar en el futuro, nos cuesta mucho proyectarnos hacia el futuro porque empezamos a ver nuestro pasado y presente y no creemos que nuestra vida pueda cambiar, o creemos que puede cambiar pero que eso llegará cuando Dios quiera.

Te tengo buenas noticias, una es que eres una nueva creación, en 2 Cor. 5:17: Por lo tanto, si alguno está en Cristo, es una nueva creación. ¡Lo viejo ha pasado, ha llegado ya lo nuevo! (NVI)y la otra es que Dios es galardonador de aquellos que le buscan, Hebreos 11:6 En realidad, sin fe es imposible agradar a Dios, ya que cualquiera que se acerca a Dios tiene que creer que él existe y que recompensa a quienes lo buscan. (NVI), de aquellos que creen y ponen en práctica su Palabra. Así que hoy tu puedes cambiar tu presente y construir tu futuro. Dios quiere siempre lo mejor para ti.

Quizás en el día de hoy estás enfrentando un desengaño en tu relación matrimonial, estés teniendo problemas con tu hija o hijo, atravesando un problema financiero o de enfermedad, un problema laboral, sientes que el mundo se acaba y no sabes que hacer, lo has intentado tantas veces y de muchas maneras pero nada que se resuelve, piensas y te cuestionas: voy a la iglesia, oro, ayuno, ofrendo y diezmo, pero no veo a Dios actuando en mi vida.

Nos perdemos gran parte de la vida porque no vemos nuestro futuro, hemos estado tan ocupados con nuestros pensamientos en el pasado que no disfrutamos el presente. Son los ojos del pasado los que están guiando tu presente, es el razonamiento o cuestionamiento lo que te impide muchas veces alcanzar la tierra prometida. No dejes que el pasado robe tu futuro. Se quien debes ser, se tu mismo.

Hay un cuento del famoso escritor Jorge Bucay que dice:
“Un rey fue hasta su jardín y descubrió que sus árboles, arbustos y flores se estaban muriendo. El Roble le dijo que se moría porque no podía ser tan alto como el Pino.
Volviéndose al Pino, lo halló caído porque no podía dar uvas como la Vid. Y la Vid se moría porque no podía florecer como la Rosa. La Rosa lloraba por no ser fuerte y sólida como el Roble.
Entonces encontró una planta, un Clavel floreciendo y más fresco que nunca.
El rey le preguntó: ¿Cómo es que creces tan saludable en medio de este jardín mustio y sombrío?
La flor contestó: Quizás sea porque siempre supuse que cuando me plantaste querías claveles. Si hubieras querido un Roble, lo habrías plantado. En aquel momento me dije: Intentaré ser Clavel de la mejor manera que pueda y heme aquí el más hermoso y bello clavel de tu jardín.”

Así a veces llega a pasar en nuestras vidas, podemos estar marchitándonos; en nuestras propias insatisfacciones, en nuestras quejas, en las absurdas comparaciones con los demás, o en la búsqueda del culpable de todas mis desgracias…”Si yo fuera”, “si yo tuviera”, “si mi vida fuera”, “si mi esposo o tal persona cambiara”, “si tan sólo hubiera hecho tal o cual cosa” o “si no hubiera hecho aquello…”. “si tal persona” …

Deje de vivir un futuro incierto, y comienze a vivir lo que Dios diseño para usted.
Te invito a realizar el siguiente ejercicio:
¿Cómo se visualiza en el 2009? ¿Y en el 2014? ¿Y en el 2019? ¿Qué está faltando hacer para que “eso” se convierta en realidad? ¿Qué emociones se manifiestan al verte logrando cada una de las cosas que te propusiste? Ahora su futuro comienza a partir de hoy y no mañana.

Recuerda que el pasado es historia que tiene valor como fuente de enseñanza para apoyarnos en los valores positivos y aprender de los errores para no tener que repetirlos. Porque Dios, en su sabiduría, no nos permite volver al pasado y mucho menos modificarlo. El pasado no es para que lo vivas, cada vez que lo haces te alejas de tu futuro.
“Dios nos concedió algo de su poder creador al darnos primero la capacidad de imaginar cómo serían las cosas y, después, la capacidad de trabajo para convertir en realidad lo que somos capaces de imaginar”. Samuel Weiss

Elige hoy cambiar tu presente y construir tu futuro.

En amor y liderazgo,
Pedro Sifontes
Conferencista y Entrenador de Liderazgo y Coaching. Fundador y Director del Centro de Liderazgo Creativo. Pastor del Centro Familiar Internacional Las Buenas Nuevas, Panamá.

Hoy...Abundaré En Consolación


“Porque de la manera que abundan en nosotros las aflicciones de Cristo, así abundan también por el mismo Cristo nuestra consolación” II Corintios 1:5

Hay una proporción bendita en la vida cristiana. La Regla de Providencia sostiene un par de escalas - - en un lado Él pone ensayos para su pueblo, y en el otro él pone sus consuelos. Cuando la escala de ensayo o prueba se vacía encontraré siempre la escala de consuelo en la misma proporción; y cuando la escala de ensayos o pruebas está llena, encontraré la escala de consuelo con el mismo peso.

Cuando las nubes negras se acumulan en gran cantidad, la luz se da a conocer más brillantemente para mi. Cuando la noche me rodea y la tempestad me envuelve, el Capitán Celestial está siempre más cerca de su tripulación.

Es algo bendito, cuando nosotros estamos bajo el peso de la angustia por que de esta manera experimentamos el peso de su consuelo, y es el consuelo del Espíritu.

Una de las razónes,porque las pruebas preparan la sala para el consuelo, es que los grandes corazones solamente pueden ser formados por y a través de los grandes problemas. La zanja de los problemas excava el depósito de comodidad más profunda de la sala para el consuelo.
Hoy se que en medio de las pruebas Dios viene a mi corazón y cuando Él lo encuentra lleno - - Él comienza a romper mis comodidades hasta dejarlo vacío; entonces hay más espacio para la gracia.

Otra razón por qué nosotros los cristianos somos frecuentemente muy felices en nuestros problemas, es que en los problemas tenemos las negociaciones más cercanas con Dios. Cuando el tesoro está lleno, el hombre cree que puede vivir sin Dios: cuando el bolso revienta con el oro, el hombre trata de hacer las cosas sin tanta oración. Pero una vez que los tesoros están lejos, en ese momento si queremos a Dios.

No hay grito tan bueno como que viene desde el fondo de las montañas; ninguna oración tan dulce como la que viene desde las profundidades del alma, mediante aflicciones y pruebas profundas. De aquí en adelante ellas nos traen a Dios, y nosotros somos más felices; por tener cerca a Dios.

Señor. Ayudáme a ver las aflicciones y las pruebas como elementos vitales para contemplar y disfrutar tu consolación. Tus consuelos abundan para mi cuando las aflicciones me rodean . Amén.

Dr. Serafìn Contreras Galeano.

viernes, 17 de octubre de 2008

En este día Dios te dice:

Hola hijo/a:

Yo me entregué por ti, mi vida di por ti
Vine a entregar mi corazón por ti, por ti
Eres tan valioso para mí, que yo vine a este mundo a derramar todo de mi

No me importó ser azotado, no me importó ser escupido
No me importó ser insultado con tal de tenerte a ti
No me importó que me arrastraran, no me importó que me injuriaran,
No me importó... porque lo hice por ti

Hijo/a, yo te amo, yo te amo y por siempre te amaré
No importa donde tu estés
Yo te amo aunque intentes escapar
De mi no podrás huir
Mi amor te perseguirá
Yo te amo, mi vida di por ti
Yo te amo, mi vida entregue por ti

Y me encanta cuando alzas tu voz, cuando dices que me amas
Me gusta oírte

Sal de la cueva yo quiero ver tu rostro, quiero escuchar tu voz
Me gusta q me digas que me amas, porque de esa manera
Mi muerte no fue en vano

Yo quiero hacer de ti un hijo conforme a mi corazón
Yo quiero que aprendas a disfrutar las bendiciones de mi casa
Acércate confiado a mí porque yo ya pagué el precio
Y te puedes acercar
Acércate, acércate, quiero saber lo que te pasa, quiero saber lo que te pasa,
quiero saber lo que te duele.

Acércate, acércate, quiero saber lo que tu traes, quiero saber lo que esta en tu corazón

Acércate a mí, que yo me quiero acercar a ti
Acércate a mí porque yo haré cosas grandes y desconocidas contigo
Acércate a mi que yo quiero contarte todo lo que yo tengo preparado para ti
Son cosas grandes que todavía ni imaginas, son cosas inmensas que todavía ni se han subido a tu mente.

Son cosas grandes que para ti parecen imposibles pero para mi son posibles

Cree en Mí, cree en Mi Palabra. Amado/a, cree en mis palabras.

Andrés Reina
DevocionTotal.com

miércoles, 15 de octubre de 2008

El don de la profecía

El don de la profecía es uno de los dones mas maravillosos que posee el cuerpo de Cristo.
¿Que es el don de la profecía?
Es un don sobrenatural que Dios da a la iglesia para recibir divinamente un mensaje del mismo corazón de Dios, para las cosas distantes o futuras.
En 1° Corintios 12:10, Pablo habla acerca de este don.
Es un don que dios a elegido para bendecir a su pueblo. La palabra profética puede ser personal, grupal o algo más masivo como a una congregación.

¿Cuál es el propósito de la profecía?
Edificar, exhortar y consolar.

Edificar: es construir buenos cimientos en la vida de una persona o congregación, infundir buenas actitudes, es formar a la persona o a la iglesia a la medida, estatura y plenitud de Cristo.
Dentro de la profecía encontramos palabra de dirección, en lo personal muchas veces e recibido esta clase de palabra, en Hch 9:10-18 vemos a un discípulo llamado Ananias, que recibe una visión de parte de Dios con instrucciones especificas, para que pusiera sus manos sobre Saulo y orara para que este recobrara la vista. Recordemos hermanos que en ese momento Saulo no era Pablo, el que después comenzaba sus cartas diciendo gracia y paz sea a vosotros, sino todo lo contrario, era un hombre que perseguía y encerraba a los miembros de la iglesia en la cárcel, Hechos 8:3, fue el mismo que estubo de acuerdo con la muerte de Esteban el primer mártir de Hch 8:1.
Vemos también en el antiguo testamento en 1° de Samuel 15:3 como Samuel da instrucciones especificas al rey Saúl, diciéndole: Destruye Amalec y todo lo que él tiene hombre, mujer, niño, vacas, ovejas, etc.
Luego vemos él versículo 9, como Saúl desobedece la palabra dada de parte de Dios sobre el profeta Samuel. Notamos claramente que por medio de la profecía Dios da dirección, instrucción, y dos claros ejemplos de obedecer o no a lo que Dios les estaba mandando a hacer.
La palabra profética dada en estos casos es para accionar, inmediata.
También puede ser una palabra de comisión, para comisionar a una persona al ministerio. Cuántos de nosotros recibimos alguna vez una palabra sobre lo que Dios va a hacer en nuestro ministerio, en nuestras familias, tal vez en negocios que debemos emprender.
Es verdad que la profecía suena a veces algo misterioso, no debemos tener temor a una palabra profética, ni tampoco tomarla a la ligera.
1° Tesalonicenses 5:19-21 "... No apaguéis al espíritu, no menospreciéis las profecías, exadminadlo todo y retened lo bueno"

Exhorta: Es corregir cuando nos estamos desviando del plan de Dios, para nuestras vidas. Siempre la palabra tiene que ser dada con amor y nunca si es personal delante de otras personas, no se trata de humillar a la persona ni mucho menos herirla, es únicamente con el fin de traer corrección, luz a la persona para que su vida crezca y sea de bendición para otros.

Consolar: 2° Corintios 1:3, Bendito sea el Dios y el Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de misericordia y Dios de toda consolación.
Dios usa la profecía para aliviar nuestras almas de la aflicción para traer refrigerio a nuestros huesos, para levantarnos, sostenernos, y así poder soportar con paciencia las dificultades que debemos como hijos de Dios afrontar.
Cuando recibimos una palabra profética tenemos que tener en cuenta varios puntos.

  • ¿La persona de la cual recibí la palabra profética es de buen testimonio?

  • ¿Hay frutos en su vida? ¿Vive lo que predica?

  • Debemos examinar la profecía e ir a la fuente que es la palabra de Dios.

  • Tenemos que orar por la palabra dada.

  • Es una confirmación a nuestro espíritu.

  • Saber que la palabra que recibimos puede pasar mucho tiempo antes que se cumpla.

  • No dejar que el diablo quiera arrancar la palabra profética de nuestros corazones.

  • Saber que toda palabra profética esta condicionada.

Tenemos una idea equivocada de la palabra profética y decimos: Dios me hablo que me va a levantar como pastor y me va a dar una iglesia grande con muchos miembros. Y me siento pasivo a esperar que la palabra se cumpla. Pasaron 10 años y esa palabra no se cumplió, le hechamos la culpa a Dios, pensamos: ¿Acaso Dios se equivoco? No Dios nunca se equivoca. En vez de hecharle la culpa a Dios, yo me pregunto: ¿qué hicimos nosotros todos esto años para que esa palabra se cumpla?

¿Tuvimos vida de adoración? ¿Nos rendimos totalmente a el? ¿Estudiamos la Biblia, la palabra de Dios cada día de nuestras vidas? ¿Vivimos bajo obediencia y sujeción de nuestros pastores y lideres? ¿Accionamos por fe la palabra dada?
Hermano Dios nos da la palabra profética, nos capacita, nos provee las herramientas, nos da el poder de su Espíritu Santo, nos promete sostenernos en los momentos difíciles, y nos asegura el éxito, el resto todo depende e nosotros.
Por eso hermanos abracemos la palabra profética, llevemos una vida de obediencia, santidad, fe y oración.
Entonces Dios cumplirá su propósito en ti y en mi.

Escrito por: Marcela Miryam Pagella.
Para: Avanpormas.com

¿Son todos los pecados iguales ante Dios?

En Mateo 5:21-28, Jesús iguala el cometer adulterio con tener lujuria en tu corazón, y cometer homicidio con tener odio en tu corazón. Sin embargo, esto no significa que los pecados sean iguales. Lo que Jesús estaba tratando de hacer entender a los fariseos, era que es pecado aún el pensar acerca de, o querer realizar un hecho. Los líderes religiosos de los días de Jesús enseñaban a la gente que estaba bien pensar acerca de cualquier cosa que quisieras, mientras no llevaras a cabo con hechos esos deseos. Jesús proclamó que nuestras acciones son el resultado de lo que hay en nuestros corazones (Mateo 12:34).

Así que, aunque Jesús dijo que tanto la lujuria como el adulterio son pecados – eso no significa que sean iguales. Es mucho peor el matar a una persona que simplemente odiarla – aún cuando a los ojos de Dios ambos son pecados. Existen grados de pecado. Algunos pecados son peores que otros. Al mismo tiempo, considerándolos ante las consecuencias eternas y la salvación, todos los pecados son lo mismo. Todos y cada uno de los pecados conducirán a la condenación eterna (Romanos 6:23). Todos los pecados, sin importar cuán “pequeños” sean, son contra un infinito y eterno Dios, y es por eso que son merecedores de un castigo infinito y eterno. Al mismo tiempo, no hay un pecado “tan grande” que Dios no pueda perdonar. Jesús murió para pagar el castigo por el pecado (1 Juan 2:2) Jesús murió por TODOS nuestros pecados (2 Corintios 5:21) ¿Son todos los pecados iguales ante Dios? Si y no. ¿En severidad? No. ¿En castigo? Si. ¿En que sean perdonables? Si.

martes, 14 de octubre de 2008

Dios proveerá

Dios da alimento y provee a los que le temen y adoran reverentemente.

Por Joyce Meyer


¿Acaso está usted preocupado por la provisión en esta etapa de su vida? ¿Necesita algún tipo de sustento, e ignora de dónde va a venir? He realizado encuestas en las conferencias y estas demuestran que al menos un cincuenta por ciento de la gente tiene temor por no saber de dónde vendrá su provisión.
El Salmo 111:1-5 dice: "Alabaré a Jehová con todo el corazón en la compañía y congregación de los rectos. Grandes son las obras de Jehová, buscadas de todos los que las quieren. Gloria y hermosura es su obra, y su justicia permanece para siempre. Ha hecho memorables sus maravillas; Clemente y misericordioso es Jehová. Ha dado alimento a los que temen; Para siempre se acordará de su pacto". Note el último versículo en donde el salmista está alabando y adorando a Dios por sus grandes obras a favor de su pueblo.
Esto nos dice que siempre que adoremos a Dios, vamos a tener su provisión ¡la adoración gana la batalla!
Marque ese versículo en su Biblia; medite en él y trate incluso de memorizarlo porque contiene la clave para satisfacer todas sus necesidades. De esa forma, cuando la necesidad venga a su vida, tendrá atesorada en su corazón la Palabra de Dios, y ella le fortalecerá y ayudará a permanecer confiado, en vez de atemorizarse.
Quizás le dijeron que perderá su empleo o su casa. Quizás usted es una persona de edad madura que recibe seguro social, y se pregunta qué le deparará el futuro. O ve que los precios suben todo el tiempo, y el diablo le susurra al oído: "No vas a tener suficiente para vivir". Tal vez los números simplemente no le cuadran; sus ingresos no le alcanzan, aunque esté haciendo todo lo que esté a su alcance.
Cualquiera que sea el motivo que lo esté preocupando en cuanto a su provisión, tome este versículo y digiéralo. Jeremías dijo: "Fueron halladas tus palabras, y yo las comí; y tu palabra me fue por gozo y por alegría de mi corazón..." (Jer 15:16). Debemos, por decirlo así, "masticar" la Palabra de Dios. En sus escritos, el salmista usa la palabra selah, que significa "haga una pausa, y piense en eso con calma", para animar al lector a digerir lentamente lo dicho.
Esa Palabra dice que Dios da alimento y provee a los que le temen y adoran reverentemente. Cualquiera que sea su situación, Dios le proveerá siempre que usted lo adore.
La adoración es realmente divertida y vigorizante; la preocupación carga nuestros corazones y nos hace perder el gozo. ¡Adore, y no se preocupe! ¡La batalla es del Señor!
Si lee el libro de Proverbios y viera todas las promesas fundamentales hechas para la persona que camina sabiamente, se dará cuenta que la reverencia y la adoración son el principio de la sabiduría.
La Biblia dice que quienes caminan en sabiduría serán ricos, vivirán una larga vida y serán felices. Serán bendecidos, tan bendecidos que los envidiarán (Pr 3:1-18).
Pero no existe sabiduría sin adoración. Actualmente, muchas personas buscan conocimiento, lo que es bueno, pero la sabiduría es mejor. La sabiduría es el uso correcto del conocimiento. El conocimiento sin sabiduría puede hacer que la persona se llene de orgullo, lo que finalmente arruinará su vida. Una persona sabia siempre será conocedora, pero no todas las personas conocedoras son sabias.
Estimo que en la sociedad actual, exaltamos el conocimiento más de lo que debemos. La educación parece ser el principal objetivo de la mayoría de la gente, y sin embargo, nuestro mundo decae moralmente en forma vertiginosa. La educación es buena, pero no es mejor que la sabiduría. La Palabra de Dios nos dice que clamemos por sabiduría; que la busquemos como la plata y el oro; que la hagamos una necesidad vital de la vida. No hay nada más importante que la sabiduría, y el principio de ellas es la reverencia y la adoración. Al adorador le será enseñada sabiduría por Dios.
Joyce Meyer es una maestra de la Palabra y la autora de varios éxitos de ventas como lo son: Controlando sus emociones, El desarrollo de un líder, la serie ¡Ayúdenme! y La batalla es del Señor.

Un Dia Mas - Daniel Calveti

viernes, 10 de octubre de 2008

La importancia de la adoración en los momentos de prueba

Por Claudio Freidzon


En esta ocasión, quiero compartir contigo, una historia muy particular que relata la Biblia sobre el pueblo de Israel. Muchas fueron las situaciones por las que el Pueblo de Dios atravesó y en este caso, se trata de una que tiene que ver con las pruebas y dificultades en momentos claves.

Según el pasaje de 2da. de Reyes capítulo 3, Israel se hallaba en problemas. Tenía que luchar contra un pueblo: los moabitas. Ahora bien, ¿cuándo es que Israel se mete en problemas? Básicamente, cuando planea atacar a este pueblo con sus propias fuerzas, es decir, humanamente. Cuando ya todo había comenzado y se hallaban en el medio de la guerra, se dieron cuenta de que estaban en una posición poco alentadora y que iban a perder. Entonces el rey de Israel, Josafat viéndose comprometido y que estaban perdiendo, preguntó “¿no hay aquí profeta de Jehová para que consultemos a Jehová por medio de él?”. Esta fue la reacción del rey, querer buscar la guía de Dios luego de haber comenzado a hacer las cosas sin Dios. No obstante, ¿quién estaba allí? Eliseo, profeta de Jehová a través de quien la palabra de parte de Dios se hace presente.

Se metieron en problemas, no habían consultado a Dios. Estaban aterrorizados porque estaban a punto de perderlo todo. Se dieron cuenta que no tenían ni la estrategia, ni la salida y que de seguir así , iban a perecer, iban a morir. Humanamente iban a fracasar, por lo tanto, el rey Josafat emprendió la búsqueda desesperada de Dios a través de Eliseo. La Palabra del Señor vino sobre Eliseo el cual dijo “haced en este valle muchos estanques”, y luego agregó “esto es cosa ligera a los ojos de Jehová que entregará también a los moabitas en vuestras manos”. Ahora bien, hay algo sustancial que quiero que aprecies y es que cuando el pueblo de Israel acude al profeta, éste les responde “no puedo tener palabra, no puedo decir la estrategia hasta que no haya música”. Allí, enseguida, trajeron al tañedor que era un hombre que ejecutaba un instrumento. Y en ese mismo momento en que comenzó a fluir la música y la adoración bajo la unción de Dios, en ese momento vino la Palabra de Dios, cayó su presencia y el Señor les dio la estrategia según la cual les dijo “no veréis viento ni veréis lluvia pero este valle será lleno de agua y beberéis vosotros y vuestras bestias y vuestros ganados porque esto será cosa ligera a los ojos de Dios”. En otras palabras, lo que hizo el Señor fue darles una estrategia apareciendo justo en el momento oportuno, en que el pueblo más lo necesitaba.

En esta oportunidad quiero decirte a ti, que está encerrado en luchas, en necesidades en problemas, que estas atravesando por pruebas, que mientras la presencia de Dios desciende, cosa ligera es a sus ojos hacer el milagro que estás esperando, como algo sencillo en manos de nuestro padre, verás a tus enemigos caer delante de ti. Para nosotros los milagros son imposibles pero para Dios es cosa ligera porque para él hacer un milagro es algo simple. Solo debemos abrir nuestro corazón y creerlo. Simplemente tenemos que decirle al Señor: “Señor, yo lo creo”. Es necesario que la presencia de Dios te envuelva, que permitas que en tu corazón haya la suficiente libertad para que Dios te hable y te muestre lo grande y lo maravilloso que es él en un mundo seco, vacío donde la abundancia prácticamente no se ve, sino la escasez, la esterilidad, etc. Dios te habla de que él es quien hace que las promesas se cumplan y quien promete que te multiplicará en abundancia. Retomando el ejemplo del pueblo de Israel, lo cierto es que el valle debía poseer posos que el Señor luego cubriría con agua para que a la mañana siguiente, los enemigos, es decir, los moabitas pensaran que el reflejo del agua fuera la sangre de los mismos israelitas y avanzaran sobre el territorio totalmente desarmados como lo hicieron. De esta manera el Señor entregó a Israel al enemigo en sus manos. Si sientes que tu situación es similar a la que relata este pasaje bíblico, levanta tus ojos a los cielos porque de El vendrá tu socorro. La Biblia dice ¿quién estará de pie cuando el poder de Dios se manifieste? Dios es capas de mostrarse aún en el último momento. Cuando parece que todas las puertas se cerraron, cuando parece que todo es imposible, cuando el dolor y las situaciones se empeoran vamos a dejar que sea la música, la alabanza traiga la presencia de Dios y El intervendrá en su vida. Cosas que puedan estar enquistadas en su vida, Dios las puede quitar hoy. Viene un tiempo de sanidad, un tiempo de renuevo. La Biblia dice que cuando hay alabanza, la presencia de Dios desciende. Por eso te animo a que puedas ser un verdadero adorador, aún en los momentos difíciles y de adversidad. Tú y yo podemos atraer la presencia de Dios mediante la música, en adoración y alabanza a Él. Si tú le alabas y abres tu corazón, Él se glorificará cuantiosamente delante de ti. ¡Que el Señor te bendiga!

jueves, 9 de octubre de 2008

¿Qué es el Arrebatamiento de la iglesia?

La palabra “arrebatamiento” no se encuentra en la Biblia. Sin embargo, el concepto del Arrebatamiento, es claramente enseñado en la Escritura. El Arrebatamiento de la iglesia es el evento en el cual Dios saca a los creyentes de la tierra para dar paso a Su justo juicio que será derramado sobre la tierra durante el período de la Tribulación. El Arrebatamiento es descrito primeramente en 1 Tesalonicenses 4:13-18 y 1 Corintios 15:50-54. 1 Tesalonicenses 4:13-18 describe el Arrebatamiento como el acto en el cual Dios resucita a todos los creyentes que han muerto, dándoles cuerpos glorificados, y después partiendo de la tierra con aquellos creyentes que estén aún vivos, a quienes también les serán dados cuerpos glorificados. “Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor.” (1 Tesalonicenses 4:16-17).

1 Corintios 15:50-54 se enfoca en la naturaleza instantánea del Arrebatamiento y en los cuerpos glorificados que recibiremos. “He aquí, os digo un misterio: No todos dormiremos; pero todos seremos transformados, en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos transformados.” (1 Corintios 15:51-52). El Arrebatamiento es el glorioso evento que todos debemos esperar con anhelo. Entonces finalmente estaremos libres de pecado, y estaremos para siempre en la presencia de Dios. Existe mucho debate sobre el significado y alcance del Arrebatamiento. Esta no es la intención de Dios. Más bien, Dios quiere que al considerar el Arrebatamiento “nos animemos unos a otros con estas palabras.”

Tus Manos


Tus manos han llegado
A mi triste soledad
Y para siempre has arrancado
Esa enemiga sin piedad
.

Tus manos han salvado
A esta princesa de escapar
Lejos de su amado
Que la hizo despertar
.

Tus manos han librado
Mi alma de pecar
Y sólo tú me has dado
Razones para amar
.

Tus Manos han Limpiado
Esta oscura suciedad
Y cada llaga tú has borrado
Con tu dulce sanidad
.

Tus manos han formado
Este vaso con amor
Y tu voz ha despojado
La amargura y el rencor
.

Tus manos acarician
Con ternura y compasión
Y tus besos que destilan
Manantiales de ilusión
.

Patricia J. Olivera Costilla.

Dulce Refugio - Danilo Montero







miércoles, 8 de octubre de 2008

Con el favor de Dios


Por Marcos Barrientos

Sin el favor de Dios seremos estorbados; con el favor de Dios seremos impulsados

Tengo un amigo muy querido que cada vez que me despido de el y le manifiesto mi deseo de volverlo a ver pronto me responde: “Con el favor de Dios” Y yo se que no lo dice por costumbre sino por convicción de que esta frase encierra una verdad muy poderosa: Todo es posible con el favor de Dios!

Y es que el Favor de Dios es la influencia que Dios ejerce sobre los hombres y las circunstancias para abrirnos camino donde no lo hay y para destrabar las puertas que estaban cerradas para que pasemos por ellas. Es el poder de su gracia ayudándonos a alcanzar los sueños que hay en nuestro corazón.

Al escribir estas palabras no puedo evitar el pensar en lo que Dios esta haciendo en estos días: El mundo hispano esta experimentando un despertar espiritual muy importante. Por todo el continente podemos ver señales alentadoras de una revolución espiritual que esta trayendo renovación.

Como nunca antes, se esta levantando un ejercito de adoradores del Dios altísimo que están llenando las naciones con cánticos de liberación. El Espíritu Santo esta siendo derramado sobre los jóvenes y los esta haciendo profetizar. Me regocijo porque una nueva generación de “salmistas” esta siendo levantada por Dios, que sueña con ver Su Gloria!

Sin embargo, es una generación que necesita ser instruida en la importancia de vivir con el favor de Dios. Es obvio que los resultados que estamos teniendo y el fruto que estamos cosechando no son a causa de nuestros dones, capacidades o gran unción, sino que son una consecuencia directa de el derramamiento de la gracia de Dios sobre nuestras naciones. Indudablemente estamos viviendo en “el año agradable del Señor”. Y a pesar de que corporativamente estamos siendo favorecidos por Dios con este despertar, necesitamos aprender, como individuos, a vivir con el favor de Dios .

Hace unos dos meses, al estar en una reunión devocional, el Señor trajo a mi memoria un pasaje de la escritura que impresiono mi corazón:

3 No se aparten de ti la misericordia y la verdad;

átalas a tu cuello.

Escríbelas en las tablas de tu corazón,

4 y hallarás gracia y buena opinión

ante los ojos de Dios y de los hombres. Prov. 3:3-4

Aprendemos de este pasaje que la gracia y la buena opinión de Dios y de los hombres es algo que se adquiere, que no viene automáticamente. La palabra “hallar” contiene la idea de obtener algo que se ha buscado con interés. ¿Y por que deberíamos de buscar con interés el favor de Dios? Porque es lo único que nos puede hacer prosperar y avanzar en el propósito que Dios diseñó para nosotros.

Permítanme hablar un poco a los salmistas y líderes de alabanza: Debemos cultivar, ejercitar y desarrollar los dones que Dios nos ha dado para funcionar en nuestro ministerio. Debemos buscar la excelencia musical y perfeccionar nuestra técnica. Pero por encima de todo debemos anhelar crecer en gracia y contar con el favor de Dios. Esto ultimo, como ninguna otra cosa, abrirá las puertas a nuestro ministerio ya que tendremos buena opinión delante de los hombres. El Apóstol Pablo, después de pasar muchos años en el desierto fue finalmente aceptado por los líderes de la Iglesia pues reconocieron la gracia de Dios en su vida. “y cuando percibieron la gracia que me había sido dada, Jacobo, Pedro y Juan, quienes tenían reputación de ser columnas, nos dieron a Bernabé y a mí la mano derecha en señal de compañerismo, para que nosotros fuésemos a los gentiles y ellos a los de la circuncisión.” Gal 2:9

Hay tres ejemplos de crecimiento en la gracia en las Escrituras:

1. Samuel:

“Y el niño Samuel crecía en estatura y en gracia para con Dios y los hombres.” 1 Sam 2:26

2. Esther:

“ Entonces dijo: Si al rey le parece bien, si he hallado gracia delante de él, si el asunto le parece correcto al rey y yo soy agradable a sus ojos, que se escriba para revocar las cartas maquinadas por Amán hijo de Hamedata, el agageo, que escribió para destruir a los judíos que están en todas las provincias del rey.” Esther 8:5

3. Jesús:

“Y Jesús crecía en sabiduría, en estatura y en gracia para con Dios y los hombres.” Lucas 2:52

Como podemos apreciar en estos tres pasajes, el favor de Dios se debe de manifestar en las tres áreas de nuestro ser: espíritu, alma y cuerpo. (gracia, sabiduría y estatura)

El espíritu halla gracia a través de la humildad, el alma adquiere sabiduría a través del entrenamiento y el cuerpo madura y crece y se convierte en algo agradable a los ojos de Dios al ser presentado como un sacrificio vivo y santo en adoración. (Rom 12:1)

En conclusión, no hay cosa mas valiosa que contar con el favor de Dios en nuestra vida. Sin el favor de Dios seremos estorbados; con el favor de Dios seremos impulsados. Sin el favor de Dios nos agotaremos; con el favor de Dios tendremos nuevas fuerzas. Sin el favor de Dios fracasaremos; con el favor de Dios triunfaremos.